La Policía Local de Sant Josep intervino este pasado fin de semana en dos locales de alterne por vulnerar las restricciones sanitarias fijadas para combatir la pandemia de coronavirus. En total, durante el fin de semana los agentes municipales interpusieron 10 actas de sanción por incumplir las medidas de seguridad sanitaria.

La primera actuación fue el viernes por la noche en la calle Valencia, en Port des Torrent. Al tratarse de un local comercial, los agentes precintaron las instalaciones, interrumpieron la actividad y procedieron a denunciar los hechos. La segunda intervención fue el sábado a las 2 de la madrugada en la calle Río Guadiana de Can Sifre. En esta ocasión se trataba de una vivienda, por lo que a los residentes en la misma se les permitió permanecer en ella aunque se precintó la actividad.

Durante el fin de semana se recibieron varios avisos y denuncias y la Policía Local realizó intervenciones de control de espacios públicos como parte de su labor de vigilancia de las restricciones por el Covid-19. Uno de los avisos fue una llamada que denunció que un grupo de personas hacía botellón en el complejo abandonado del Festival Club de Sant Agustí en la tarde del sábado. Cuando los agentes llegaron al recinto encontraron a un grupo de 15 personas, aunque no pudieron comprobar que ninguna de ellas hiciera botellón. En cambio, sí que sancionaron a 10 por no respetar la distancia social de metro y medio y no hacer un uso adecuado de la mascarilla.

El domingo, la Policía Local de Sant Josep tuvo que acudir de nuevo a Festival Club por un aviso de jóvenes haciendo botellón. Sin embargo, los agentes comprobaron que las personas presentes en las ruinas estaban separadas en pequeños grupos y que no estaban bebiendo alcohol.

Entre otras actuaciones menores, los agentes también acudieron a las pistas de baloncesto de Can Raspalls porque un grupo de jóvenes había roto los precintos. Los agentes les informaron de que no podían permanecer allí y de que las pistas estaban cerradas. También acudieron el domingo a las cinco de la tarde a uno de los aparcamientos de la discoteca DC-10 en la carretera de ses Salines. Al llegar, comprobaron que se trataba de una actividad deportiva federada, un partido de softball, pero se advirtió a los padres presentes de que no estaba permitida la presencia de público.

Botellón en Vila

Botellón en Vila

Por otra parte, la Policía Local de Ibiza denunció el domingo a cuatro jóvenes por beber alcohol en un parque infantil precintado dentro del horario del recién estrenado toque de queda decretado por el Gobierno.