El buque de Baleària 'Rosalind Franklin', que salió del puerto de Barcelona anoche a las 22 horas y que tenía previsto llegar a Ibiza en torno a las 6.45 de esta mañana ha sufrido un fallo en las máquinas sobre las seis de la mañana y ha estado parado unas cuatro horas a seis millas de Ibiza con más de 100 pasajeros a bordo. El barco ha atracado en el puerto a las 11.25 de la mañana, acumulando un retraso de algo más de cinco horas y media sobre la llegada prevista.

Según fuentes consultadas del puerto de Ibiza, el buque se ha quedado sin máquina y quedó a la deriva cerca de la costa de Ibiza, aunque debido a la dirección a la que soplaba el viento se fue alejando poco a poco. Por tal motivo un remolcador salió del puerto hacia el Rosalind Franklin, para acercar el buque hacia la costa y dejarlo fondeado. Aunque finalmente, sobre las 10.30 de la mañana, los pasajeros han sido informados por la megafonía del buque de que la avería estaba solucionada y que iniciarían el regreso a puerto.

Un pasajero ha contado a Diario de Ibiza que a las 10 de la mañana sólo se les había informado de que el barco estaba "más o menos a una milla de tierra", aunque en realidad está más lejos.

El buque averiado de Baleària llega a puerto

El buque averiado de Baleària llega a puerto

El buque averiado, llegando al puerto de Ibiza.

Asegura que poco después de pararse la compañía ha repartido medio bollo y un zumo entre los pasajeros y más tarde a un botellín de agua: "Esa es toda la atención que nos han dado en tres horas y apenas nos han informado de nada".

"Por lo que parece, la mayoría de los pasajeros con camioneros y en la cafetería habrá como 50 personas a la espera de noticias. Por lo demás todo está muy tranquilo", dice el pasajero, que puede reconocer la zona de Platja d'en Bossa desde la ventanilla en la que se encuentra.

Otro pasajero cuenta que "la gente vagaba sin rumbo por el barco y muchos se habían quitado las mascarillas".

Lugar en el que se encontraba a la deriva el buque.