«Los recortes en sanidad se traducen en muertes evitables», afirma el portavoz en las Pitiusas del Sindicato Médico de Balears (Simebal), Carlos Rodríguez, en las puertas del Hospital Can Misses, lugar escogido para anunciar que se suman a la huelga de médicos convocada en toda España para exigir una sanidad pública de calidad. Será el próximo martes y a ella están llamados «entre 400 y 500» profesionales en Ibiza y Formentera, indican Rodríguez y Toni Pallicer, también representante del sindicato. Las movilizaciones, indican, se convocarán cada último martes de mes «mientras no haya una negociación con el Ministerio». El sindicato calcula que en las Pitiusas hacen falta en estos momentos medio centenar de médicos tanto para la atención hospitalaria como en los centros de salud. Los médicos se suman así a las protestas de otros profesionales. «La única diferencia es que nosotros hemos convocado una huelga», indica. (Ver galería de imágenes)
«Nuestra sanidad está lastrada por una década de recortes y falta de inversión», denuncia Rodríguez, que destaca que esa situación ha hecho que se incremente el «déficit» de médicos y aumente la demora para que los pacientes sean atendidos. Una situación «que se ha agravado por la burocratización excesiva» a la que están obligados. El portavoz del sindicato se mostró muy duro con la forma en la que se ha organizado la atención sanitaria desde el inicio de la pandemia: «Da la sensación de que los médicos, sobre todo los de Atención Primaria, queremos hablar con los pacientes por teléfono. No es así. Queremos atender a los pacientes presencialmente, viéndoles, tocándoles la barriga o auscultándoles, pero las directrices las toma el Govern».
Atención presencial
Atención presencial
En este sentido, Rodríguez reclama que los protocolos de atención se negocien con los profesionales teniendo en cuenta las medidas necesarias para la protección de los profesionales, como llevar equipos de protección individual (EPI). «En marzo se adoptó un sistema para solucionar la urgencia del Covid y funcionó, pero se ha ido prolongando y no funciona. Hay que cambiar. Hacen falta más médicos y más personal», apunta Pallicer, que continúa: «Teníamos una situación muy mala de partida, antes del coronavirus, que ahora ha empeorado».
«Lo deciden todo en términos políticos. Si nos convocaran podríamos cambiar cosas», reflexiona Rodríguez, que recuerda que el coronavirus «no es lo único que hay en el mundo». «Los pacientes tienen otras enfermedades», añade el sindicalista, que muestra los datos de agosto (el Ib-Salut aún no los ha actualizado) de las listas de espera de las Pitiusas, que son las que acumulan más demora media de Balears: «Han ido aumentando y eso provoca dolor, sufrimiento, invalidez y muertes».
Aunque reconocieron que no tienen datos, los representantes sindicales, que son también médicos de familia, están convencidos de que durante estos meses ha habido un infradiagnóstico de dolencias que no son Covid. «Tenemos la impresión segura de que hay infartos que no han llegado a tiempo al hospital, accidentes cerebrovasculares que no han llegado y cánceres que se han pillado tarde o en peor estado», indica Pallicer, que reconoce que, por otro lado, se ha reducido la demanda asistencial por accidentes de tráfico. «No hay cifras de este infradiagnóstico porque se esta valorando, pero se sabrá», añaden los representantes sindicales mientras varios facultativos del Hospital Can Misses se suman a la presentación.
Los profesionales están a la espera de que la gerencia del Área de Salud de Ibiza y Formentera dictamine los servicios mínimos para la jornada de paro, con la que en toda España los médicos reclaman: «Soluciones consensuadas a la saturación del sistema sanitario», un pacto «que asegure la calidad asistencial», «criterios homogéneos para el abordaje de la pandemia» en todas las comunidades, aumento del PIB destinado a la sanidad pública y la retirada del decreto «que pone en riesgo la salud de los pacientes al poder ser tratados por médicos sin ninguna especialidad, de otras especialidades y de otras categorías profesionales». Rodríguez señala que precisamente este decreto es «la gota que ha desbordado el vaso» y que les ha impulsado a convocar la huelga, pero que no es el único motivo para ella: «Las reivindicaciones son tantas y tan importantes que no se puede destacar una».
