Los empresarios pitiusos aceptan como «un mal necesario e inevitable» las nuevas restricciones anunciadas ayer para el municipio de Ibiza por la consellera de Sanidad del Govern, Patricia Gómez, y consideran que es preciso acatarlas para poder salir cuanto antes de esta epidemia y recuperar la normalidad sanitaria y económica.

La presidenta de uno de los colectivos más afectados, el de Restauración, Verónica Juan, ha visto cómo no sólo no se acepta su petición de que bares y restaurantes puedan abrir hasta las 23 horas, sino que incluso se endurecen más las condiciones. A pesar de ello, nada más conocer las nuevas restricciones afirmó: «Si queremos estar listos para el próximo verano, tenemos que hacer los deberes. Comparto las medidas que se han anunciado».

«La situación de Ibiza es muy preocupante», dijo, en alusión a las cifras de contagiados de la pandemia. Por ello, mostró su apoyo al hecho de que se haya extendido el ámbito de aplicación de estas limitaciones a toda la ciudad: «No tenía razón de ser que el confinamiento fuera tan selectivo, pues la gente se mueve de un lado a otro», comentó. «Es más coherente que se actúe sobre toda la ciudad que calle por calle», añadió.

Sin embargo, la presidenta de la Asociación de Restauración consideró que no sólo los empresarios del sector deben respetar las medidas sanitarias impuestas, sino que también deben hacerlo los propios clientes. «Hay que apelar a la responsabilidad de todos los ciudadanos. No puede ser que haya muchos clientes que entren a los establecimientos sin mascarilla o sentándose de cualquier manera», afirmó.

En todo caso, recalcó su apoyo a las nuevas medidas, porque «está claro que algo está fallando» en el control del virus. «Viendo cómo están yendo las cosas, para estar bien en abril, hay que hacer las cosas bien ahora», afirmó.

«En Vila estamos casi como en Madrid», añadió Verónica Juan.

Apoyo de los hoteleros

En la misma línea se expresó el gerente de la Federación Empresarial Hotelera de Ibiza y Formentera (Fehif), Manuel Sendino, quien consideró el anuncio hecho por Patricia Gómez como «un mal necesario e inevitable». «Si los que entienden en la materia dicen que se han de aplicar nuevas restricciones, debe hacerse», afirmó después de participar por vía telemática en un encuentro con la consellera y el resto de responsables políticos de la isla.

El representante hotelero recordó que, de acuerdo con las nuevas limitaciones, los hoteles de Vila «pueden abrir, pero sus clientes han de respetar las mismas restricciones que los residentes». En la actualidad, sin embargo, «hay pocos hoteles abiertos y los que están funcionando tienen pocos clientes».

Sendino también hizo un llamamiento a que la población respete las medidas de prevención dictadas por las autoridades, como la mejor manera para salir de las actuales restricciones. «Es bastante decepcionante ver la poca gente que se está haciendo las pruebas PCR. Pensar que hemos tenido una temporada pésima y aun así hay tan poca colaboración resulta bastante desalentador», señaló.

Por ello, es necesario ante todo que «las autoridades hagan cumplir con más intensidad las normas».

Pimeef: «Toda la isla»

El presidente de la Petita i Mitjana Empresa d'Ibiza i Formentera (Pimeef), Alfonso Rojo, se refirió también a esta cuestión en la rueda de prensa donde se presentó el Barómetro del Impacto del Covid-19 sobre las empresas (ver página 8), y dijo que «no tenía mucho sentido que se hiciera un confinamiento quirúrgico y de bisturí, calle por calle». «Lo mejor sería que se confinara toda la isla, ahora que no tenemos turistas», señaló el presidente de la Pimeef poco antes de que se hiciera público el anuncio de la conselleria de Salud.

En todo caso, consideró necesario que se consulte previamente a los empresarios a la hora de tomar este tipo de decisiones.

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