El Ayuntamiento de Sant Josep ultima el proyecto ejecutivo para instalar una nueva canalización, de dos kilómetros de longitud, que conecte la zona de las naves industriales de Sant Jordi con la depuradora de Can Bossa para acabar con los vertidos de aguas fecales en el Parque Natural de ses Salines. Un portavoz municipal explicó que esta obra, presupuestada en 1,5 millones de euros y sin partida aún asignada, es «prioritaria». El plazo de ejecución de las obras puede ser de entre seis y ocho meses. Se espera que en un plazo de dos semanas, aproximadamente,el proyecto ya esté acabado y se puedan licitar las obras.

El Consistorio ha concluido que los vertidos de fecales se producen, por un lado, por «la falta de pendiente» de la canalización , así como por las filtraciones de agua de lluvia que se producen por su deterioro. El hecho de que en la zona industrial se mezclen las pluviales con las fecales también provoca un incremento del caudal que llega a la depuradora, que, al no poder asumirlo, da marcha atrás y revienta las arquetas de los campos de los alrededores.

Así, aparte de instalar la nueva canalización con una mayor pendiente, el Consistorio también proyecta recuperar el antiguo sistema de fecales de la zona industrial (se dejó de usar tras las obras de la autovía) para evacuar exclusivamente el agua de lluvia y, con ello, reducir la carga de la red de saneamiento, según explicó un portavoz del Ayuntamiento.

El conseller de Medio Ambiente y Territorio, Miquel Mir, aseguró ayer en el Parlament, en respuesta a las críticas de Ciudadanos por los vertidos de fecales que se producen en la isla que la Agencia Balear del Agua «asesora» al Ayuntamiento de Sant Josep para que la conexión se haga de «manera adecuada».

El tanque de tormentas «funciona»

Por otra parte, Mir defendió que el nuevo tanque de tormentas del puerto de Ibiza «funciona perfectamente» y atribuyó los vertidos de aguas residuales que se produjeron durante las lluvias de hace dos semanas a una interrupción en el suministro de energía durante media hora. «El tanque es una solución importante al tema de los vertidos en el puerto de Ibiza», defendió Mir, que, de todos modos, subrayó que, mientras no se separe la red de alcantarillado de la de pluviales, no habrá garantía alguna de que no se produzcan más vertidos.

El conseller balear de Medio Ambiente resaltó que el desarrollo de las actuaciones previstas en el Pacto por el Agua será «la mejor solución» a los problemas de vertidos que padece la isla desde hace ya muchos años.

El diputado de Cs Maxo Benalal advirtió de que las fugas de aguas residuales que se producen en el Parque Natural de ses Salines podrían constituir un delito contra el medio ambiente. «Que el Govern haga lo que tenga que hacer porque estos problemas se repiten año tras año y el año pasado ya reclamé soluciones», dijo.