La facturación de las empresas de alquiler de coches en Baleares ha bajado un 80 % respecto a 2019 y desde el inicio de la pandemia, sólo 22 de las 110 empresas del sector en las islas han continuado su actividad desde que se declaró el estado de alarma.

De los 1.200 trabajadores que tiene este sector, se ha llegado a contratar a un 70 % de los empleados y al resto se han mantenido en los ERTE, señala este martes en una nota la Agrupación Empresarial de Vehículos de Alquiler en Baleares, (AEVAB), adherida a la patronal Pimem.

En cumplimiento de la ley del cambio climático, este años muchas empresas de alquiler de vehículos tenían apunto su nueva flota de coches eléctricos antes de la pandemia, las cuales algunas no pudieron anular sus pedidos pese a que su actividad iba a cesar.

La AEVAB indica que la temporada alta empezó el pasado julio, si bien la entidad lamenta las medidas adoptadas por Reino Unido y Alemania el pasado agosto ya que "paró en seco la actividad", por lo que este año la facturación ha sido de mes y medio.

El presidente de AEVAB, Ramon Reus, comenta que "año tras año" el sector se debe enfrentar a crisis que ocasionan el cierre de empresas de alquiler de coches, ya sea por falta de continuidad generacional o por la proliferación de las multinacionales.

Incide en que este año, debido a la crisis del coronavirus, muchas multinacionales que utilizan el canal del alquiler de coches para la exportación, no han adquirido y desplazado una gran flota de vehículos a Baleares, por lo que "ha habido menos competencia desleal" y más equilibrio en los precios.

"Las autoridades deben asumir su responsabilidad con la sostenibilidad de nuestro territorio y ello pasa por el control de la actividad del sector", defiende el presidente de AEVAB.