La cárcel de Ibiza ampliará este año su plantilla con un nuevo médico, por lo que contará con dos doctores tras varios años con solo uno. A pesar de esta incorporación, todavía queda una vacante por cubrir. Las condiciones poco atractivas que ofrece la sanidad penitenciaria y el elevado nivel de vida de Ibiza, así como las dificultades para encontrar una vivienda a un precio asequible, son algunas de las razones que dificultan que la prisión de Ibiza cubra las tres plazas.
La contratación de un segundo médico para la cárcel de Ibiza es una de las reivindicaciones de los sindicatos, ya que desde hace varios años solamente trabaja un médico, lo que le supone una «gran carga de trabajo», según criticaron los portavoces del sindicato CSIF (Central Sindical Independiente y de Funcionarios) y de la asociación Tu abandono me puede matar (Tampm).
Sin embargo, a pesar de que la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias confirmó a Diario de Ibiza, en una conversación telefónica y en un correo electrónico, que la prisión de Ibiza contaría con un segundo médico, no especificó cuándo se incorporaría a su puesto. Desde el CSIF explicaron a este diario que está previsto que se incorpore «a finales de año», pero carecen de datos más concretos, mientras que desde el colectivo Tu abandono me puede matar se muestran más escépticos. «Hace años que deberíamos contar con otro médico, pero nadie quiere trabajar en Ibiza. Esperemos que esta vez sea verdad y venga otro doctor», insistió un portavoz de la asociación.
Tanto el CSIF como Tu abandono me puede matar recalcaron que el Gobierno debe equiparar los complementos de insularidad de las islas menores de Balears a las de Canarias para atraer a más funciones de prisiones a las islas. Asimismo, agregaron que también sería positivo que la comunidad autónoma asumiera las competencias en sanidad penitenciaria.
Sobre la transferencia de esta materia, desde el gabinete de prensa de Instituciones Penitenciarias señalaron que, junto con Navarra, Balears es la comunidad autónoma con la que más avanzadas se tenían las conversaciones para el traspaso de la sanidad penitenciaria. «Esta Secretaría General, desde que llegó al Gobierno, está trabajando para que las comunidades autónomas asuman las competencias según indica la ley 16/2003 de cohesión y calidad del sistema nacional de salud», explicó a este diario, a través de un correo electrónico, la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias.
Según los sindicatos, con el traspaso al Ejecutivo autónomo de esta competencia aún estatal se mejorarían las condiciones laborales y económicas de la sanidad penitenciaria, por lo que se atraería a más profesionales.
