La mascarilla pasará a ser de uso obligatorio en todos los espacios públicos de Balears. El Ejecutivo autónomo ultima esta medida para poner coto a los rebrotes de coronavirus así como a las continuas aglomeraciones, fiestas ilegales y botellones. Según ha podido saber este rotativo, el decreto que modifica la norma de 'nueva normalidad' se aprobará mañana en el Consell de Govern, por lo que la medida podría entrar en vigor este mismo sábado o el domingo tras publicarse en el Boletín Oficial de les Illes Balears.

Los últimos rebrotes de Covid-19 registrados en el archipiélago balear, así como las imágenes de saturación en espacios públicos o establecimientos, han puesto en sobre aviso al Govern, que cierra la polémica con la implantación del uso obligatorio de la mascarilla en toda la comunidad.

De este modo, tanto residentes como turistas mayores de seis años deberán hacer uso de esta protección en las islas. La distancia mínima de seguridad establecida por el ministerio de Sanidad ya no será la norma a seguir para no llevar la mascarilla. Ahora su uso será obligatorio en la vía pública y en los espacios al aire libre, así como en cualquier lugar cerrado de uso público o que se encuentre abierto al público.

Hasta ahora, el uso del tapabocas quedaba limitado a los establecimientos cerrados así como a los espacios públicos en los que no se podía garantizar la distancia mínima de seguridad de un metro y medio. Con el nuevo decreto, la mascarilla deberá utilizarse siempre en todos los espacios públicos independientemente de la distancia que exista entre las personas.

Cabe recordar que el uso de la mascarilla no será exigible para quienes que padecen alguna patología o dificultad respiratoria que pueda verse agravada por su uso, tal y como se establecía durante el estado de alarma.

¿Mascarilla en la playa?

¿Mascarilla en la playa?

Con la temporada turística a medio gas, muchos se preguntan cómo afectará esta medida al turismo de las islas y si su uso se trasladará a las playas, a los espacios de trabajo o a las terrazas de bares.

La polémica está servida en Cataluña, primera y hasta ahora única comunidad autónoma en establecer esta restricción tras el final del estado de alarma.

El Govern aún debe perfilar algunos detalles aunque el borrador está ultimado. Desde la Generalitat de Cataluña han zanjado la controversia con dos excepciones: no será obligatorio utilizar la mascarilla para hacer deporte ni para ir a la playa. Un planteamiento que podría reproducir el Ejecutivo de Armengol en su norma.

En la comunidad catalana, la infracción del uso obligado y generalizado de la mascarilla se sanciona con 100 euros, según el decreto aprobado por el gobierno de Quim Torra para hacer frente a un preocupante repunte de casos que ha obligado a volver a confinar a 200.000 personas en Lleida.