El Consell Executiu del Consell de Ibiza aprobó ayer iniciar la contratación por razones de «imperiosa urgencia» de las obras del centro provisional de baja exigencia que se levantará en la zona de sa Joveria. La nueva instalación tendrá un coste de 1.498.718 euros y capacidad para acoger a 56 usuarios en siete habitaciones de ocho plazas cada una, tal y como informó la máxima institución en una nota de prensa.

Esta construcción, cuya puesta en marcha una vez construida tendrá un coste de 200.000 euros, tendrá una estructura modular, con una superficie de casi 1.000 metros cuadrados, de los que 661 m² son cubiertos, 260 m² de terraza y 32 m² de anexos exteriores.

La instalación se ubicará en un suelo contiguo al Recinto de Ferias de sa Blanca Dona, propiedad del Consell Insular, y tiene vocación de ser provisional mientras continúa la tramitación para la construcción del servicio permanente, que se ubicará en el polígono industrial de es Gorg, a pocos metros de distancia.

El coste de construcción de dicha instalación correrá a cargo íntegramente del Consell, al igual que los 200.000 euros previstos para sufragar los costes del personal que atenderá a los usuarios. Diversas empresas ya se han interesado por la obra.

El Consell obtiene esta partida del plan de impulso económico y social de cuatro millones de euros (el 20% del superávit de la institución que permite el Gobierno destinar al coronavirus).

Por otro lado, el Consell Executiu también aprobó incluir en el Plan Estratégico de Subvenciones una partida de 100.000 euros para dos bancos de alimentos (Cruz Roja y Cáritas) para ayudarles a comprar y repartir comida en el marco de la pandemia sanitaria. También se aprobó el gasto de 50.000 euros a cada una de las entidades, un pago que se hará efectivo con la firma del convenio en los próximos días.