Ocho soldados de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y cinco vehículos, bajo las órdenes del capitán Juan Serna, llegaron ayer de madrugada a Ibiza y ya se han instalado en el antiguo acuartelamiento de sa Coma para preparar la campaña contra el fuego de este año. Una vez que se organicen, en la isla quedarán tres soldados de la UME, que se encargarán de mantener siempre a punto los vehículos contraincendios para que, cuando surja una emergencia, los soldados que lleguen a Ibiza en helicóptero desde la base valenciana de Bétera puedan ponerse manos a la obra de forma inmediata. (Mira aquí las fotos)

«Lo especial y novedoso de esta campaña es la convivencia con el Covid-19, ya que condiciona parcialmente [las intervenciones de extinción de incendios], porque hay que adoptar una serie de medidas para minimizar el riesgo de contagio», explicó ayer el capitán Serna en sa Coma.

Ahora, debido a la posibilidad de contagio, en los vehículos contraincendios van menos personas, siempre que sea posible. «Vamos cuatro en lugar de cinco para que haya más espacio con el fin de poder guardar la distancia de seguridad», señaló Serna.

En cuanto a las mascarillas, el personal que trabaja en la extinción de incendios siempre las lleva cuando trabaja, en este caso antipartículas, y guantes. La diferencia es que ahora también tendrán que usar mascarillas dentro de los vehículos durante los desplazamientos. El hidrogel y la desinfección del material de trabajo, además, se imponen en un oficio que, ya de por sí, es duro, difícil y peligroso.

Una estancia «cómoda»

Una estancia «cómoda»

El capitán y los soldados que en breve regresarán a la base de Bétera están «realizando una visita de inspección» en sa Coma. «Aquí [en el antiguo acuartelamiento, cuyo mantenimiento corresponde al Consell] tenemos unas condiciones excepcionales, unas buenas instalaciones que proporcionan la posibilidad de mantener los vehículos siempre preparados», dijo Serna. «Además, la vida cotidiana en las instalaciones se hace cómoda porque el espacio del que disponemos es muy amplio y se puede hacer vida completamente normal, con cocina, ducha, aseos y aire acondicionado», añadió.

En cuanto a los vehículos que han traído a Ibiza, el capitán apuntó que se trata de la composición básica de un pelotón. «Traemos tres autobombas [que son el equivalente a tres camiones de bomberos], un todoterreno Amarok, un vehículo de telecomunicaciones y una torre de iluminación con un grupo electrógeno para garantizar el suministro eléctrico en un hipotético puesto de mando como los que se instalan cuando se produce un gran incendio que requiere de varios días para su extinción», señaló Serna. «La rapidez de actuación es un factor muy importante en un incendio y el personal [de la UME] llega a Ibiza en helicóptero en una hora y media o dos horas, de manera que hay que tener lo vehículos preparados para empezar con el trabajo lo más rápido posible», manifestó. En cada helicóptero pueden volar 16 personas.