Las medidas de control de la pandemia se relajan, la actividad comercial se despereza, algunas compañías aéreas y operadores turísticos anuncian a bombo y platillo que regresarán en julio, que es para cuando anunció ayer el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al sector que puede prepararse para recibir turistas. Pero los nuevos informes de Turespaña sobre situaciones y tendencias de los mercados turísticos emisores extranjeros, fechados el 20 de mayo, ven el vaso casi vacío, huyen del optimismo y advierten de que aunque aumente la oferta de vuelos y paquetes en las próximas semanas, la necesidad (pues el negocio se les va a pique) que mueve a las aerolíneas y turoperadores choca frontalmente con la demanda. Los viajeros extranjeros temen, esencialmente, dos cosas: una, contagiarse durante el viaje; otra, perder el dinero invertido en las vacaciones en caso de que vuelvan a cerrarse las fronteras. No son pocos los problemas que ya están teniendo los clientes para recuperar el capital adelantado para esta primavera y verano. De ahí que los viajes interiores, domésticos, sigan ganando enteros.

ALEMANIA

El Covid-19

El informe destaca que Eurowings retomará conexiones en junio y anuncia conexiones nuevas desde Hamburgo a Ibiza. Pero ahí acababan las buenas noticias. Dos de cada tres operadores turísticos y agencias de viajes alemanas «se ven en riesgo de quiebra» (que si se produce en cadena puede desencadenar un problema mayúsculo) y los viajeros no parecen muy animados, pese a que el Gobierno ha aparcado sus mensajes negativos respecto a viajar fuera del país. Así, la facturación de reservas «de viajes futuros hasta octubre cae un 139% por las anulaciones». Turespaña avisa de que «un tercio de los ciudadanos alemanes posponen o cancelan sus vacaciones de verano planeadas».

Una encuesta publicada en mayo alerta de que la crisis del coronavirus «mina el deseo de viajar de los alemanes; incluso si los viajes al extranjero son posibles desde mediados de junio, probablemente no se lanzarán de lleno a viajar». Solo el 17% quiere hacer las maletas «inmediatamente después de las primeras medidas de relajamiento», y la mitad de los encuestados «quiere esperar hasta que casi todas las ofertas estén disponibles nuevamente en el destino». Es más, casi una cuarta parte «pospondrá su viaje hasta que haya una vacuna contra el Covid-19 y sea posible viajar normalmente y disfrutar del destino sin restricciones». Porque según Turespaña, «la protección contra la infección es, con diferencia, el factor más importante para decidirse a viajar a un destino». Y no sólo eso: los alemanes quieren la garantía de «unas condiciones de cancelación flexibles» y conocer los números oficiales de la infección en destino.

Y ante ese temor a traspasar sus fronteras, el turismo doméstico sigue en auge: «Algunos TTOO han incluido o incrementado su oferta de alojamientos en el propio país, y algunos establecimientos de las costas de Alemania confirman que ya están completos al máximo de la capacidad permitida». De ahí que «no se debe esperar [en España] una recuperación estival».

Reino Unido

El 30% no viajará hasta que no haya una vacuna

Entre las buenas noticias, Turespaña explica que TUI «ha destacado a Balears como uno de los primeros destinos españoles en los que tienen previsto operar», entre ellos Ibiza. Pero en general, los agentes turísticos las están pasando canutas. Tienen tan poca liquidez que han solicitado a las líneas aéreas «una apertura anticipada de capacidad para la temporada de verano 2021 para comenzar a vender». Jet2Holidays y TUI han puesto a la venta vuelos y paquetes para entonces, y EasyJet y Ryanair ya presentan ofertas para esa temporada. Otra cosa es que el cliente arriesgue en estos momentos su dinero con un año de anticipación, cuando no está claro qué ocurrirá con la pandemia. La situación económica que atraviesan es tan delicada que ABTA, la principal asociación de turoperadores y agentes de viaje británicos, ha instado a su Gobierno, con escaso éxito, sobre la necesidad de «relajar la aplicación de la normativa de los viajes combinados para evitar quiebras masivas en el sector».

Turespaña sigue viendo «con cierto pesimismo» los viajes de británicos a España en «julio y agosto». Según las encuestas que maneja, un porcentaje creciente de los británicos (46%) han decidido posponer los viajes. Al menos España, especialmente Balears, «sigue siendo el destino preferido (20%), seguido a mucha distancia por Francia (10%), Italia (8%) y Grecia (7%)». Pero aunque las encuestas constatan que viajar está entre sus prioridades una vez termine la crisis, «más de un 60% esperaría unas semanas, una vez finalizado el confinamiento, para ver cómo evoluciona la situación antes de realizar una reserva». Y como en Alemania, «un 30% prefiere esperar a que haya una vacuna», un porcentaje que ha subido 10 puntos en dos semanas. También crece «significativamente» (del 39% al 45%) el porcentaje de los que piensan hacer turismo doméstico en los próximos seis meses.

Holanda

El estigma de las muertes

Como en Alemania y Reino Unido, numerosas empresas del sector turístico, alrededor de «un tercio», están al borde de la quiebra. Un estudio realizado a gran escala calcula que habrá este verano un 39% menos de personas en vacaciones que en 2019. Viajarán unos 4 millones de holandeses menos «entre mayo y septiembre, ambos incluidos».

Hay tendencia a reservar en territorio nacional, «lo cual encaja en la estrategia que están tomando los TTOO, que tradicionalmente estaban orientados al turismo exterior». Por ejemplo, «Corendon acaba de lanzar Costa Holanda, con paquetes de all inclusive», y Belvilla ha aumentado sus reservas en Países Bajos un 40%. Los turoperadores están apostando claramente «por las reservas en el propio país o en los vecinos (Alemania y Bélgica principalmente)», según Turespaña, que en «consultas directas con turoperadores sobre la situación de reservas» ha confirmado «las escasas o nulas reservas y muchas anulaciones» hacia España. De hecho, «algunos se centran más en las reservas de 2021». Las reservas a nuestro país han caído un 62%. A Italia, un 71%. A los países nórdicos, en torno al 50%, lo que indica que los holandeses están pendientes del número de muertes y casos por coronavirus para decidir sus destinos. Es el estigma que deja la pandemia a su paso.

Italia

El 80% teme contagiarse

Los principales operadores del mercado italiano (Alpitour, Veratour, Settemari UVET) ya están comercializando paquetes a partir de principios de julio para, entre otros destinos, estas islas. Pero la oferta se da de bruces con la demanda: «Se mantiene la prudencia y el final del estado de emergencia no incide en manera neta sobre la intención de viajar: sólo el 13% está planificando un viaje». El 80% está preocupado por contagiarse y decrece también la propensión al viaje: «El 57% no piensa desplazarse tras la emergencia», avisa Turespaña. El 20% sí desea viajar y el 15% teme no tener recursos económicos suficientes. Y el 32% de quienes viajarán, «lo hará cerca de su lugar de residencia y por un máximo de dos o tres días».

Al italiano, indica Turespaña, «le costará desplazarse por temor a contagios o a los inconvenientes que las medidas de contención implican». Y si lo hace, buscará «refugiarse en segundas viviendas o en lugares solitarios». Apuestan por «un turismo lento y sostenible, y por lugares no masificados de montaña o de mar», siempre alejados de las aglomeraciones.

Francia

El 87% hará turismo interior

La reactivación de las ventas en Francia de destinos internacionales no se prevé hasta el primer trimestre de 2021.Los turoperadores registran una parálisis de reservas estivales del 97% en todos los destinos internacionales, incluida España, pese a que es el primer destino para los franceses. Los galos dan ahora más importancia al medio de transporte, a la facilidad de repatriación y a la seguridad sanitaria que al precio de los hoteles. Será un verano «marcado por estancias domésticas, en ambientes ultralocales». El país invita al «patriotismo turístico para ayudar a la economía local y redescubrir el territorio nacional». Incluso el Gobierno «recomienda no apresurarse a reservar viajes al extranjero». Esa recomendación se traduce en que «un 87% de los franceses prevé pasar las vacaciones en su país y un 29% se niega a reservar por el momento, ni aún con garantía de reembolso», subraya Turespaña.

Belgica

Viajes con seguro

En Bélgica, «un tercio de los encuestados se quedará dentro de un radio de 200 kilómetros de su domicilio» en caso de viajar, según una encuesta: «Se primarán, sobre todo, los destinos seguros con un sistema sanitario fuerte» y no saldrán del país sin contratar un seguro de viaje. «El propio centro de crisis belga -apunta Turespaña- recomienda que si se viaja en verano, se haga asegurado». El 82% de los belgas quiere irse de vacaciones, pero «primarán los destinos de proximidad y de disfrute de la naturaleza».