El decreto ley del Govern balear sobre medidas de emergencia para reactivar la economía balear incluye un artículo, el 32, que habilita a los ayuntamientos y a los consells insulares a «otorgar ayudas y subvenciones a personas y entidades afectadas» por la crisis del Covid-19, para acelerar esa recuperación económica. Esta había sido una petición expresa formulada por el presidente del Consell de Ibiza, Vicent Marí, puesto que la normativa actual no dejaba clara la posibilidad de que las corporaciones locales e insulares puedan dar este tipo de ayudas directas, facultad que, según los juristas, correspondería al Govern.

De este modo, el Consell confirmó ayer, a través de su conseller Salvador Losa, que la institución transferirá, a partir de mañana lunes, los 1,3 millones de euros que acordó destinar a los diferentes ayuntamientos para añadirse a los otros 1,3 que aportarán las propias corporaciones municipales (sumando así 2,6 millones) para subvencionar a autónomos y microempresas afectadas por el confinamiento sufrido estos meses.

«Es la primera vez que el Consell otorga ayudas a empresarios», señaló Losa, quien dijo que, aunque ya suponía que la institución estaba facultada para efectuar estas ayudas, la confirmación dada ahora por el Govern permite actuar con mayor seguridad jurídica.

Serán los propios ayuntamientos los que gestionarán y ejecutarán el pago de estas subvenciones, que, según añadió Losa, oscilarán habitualmente entre los 1.000 y los 2.000 euros por cada beneficiario, en función de una serie de criterios que fueron pactados entre el Consell y todos los ayuntamientos hace pocos días. A partir de los próximos días se harán públicos los requisitos y condiciones necesarias para efectuar las solicitudes.

Sin embargo, estos 2,6 millones podrían aumentar y, por tanto, las ayudas individuales ser también más cuantiosas si el Govern balear, finalmente, se aviene a participar en este fondo.

El Ejecutivo autónomo proyecta una línea de ayudas propia para repartir unos ocho millones de euros entre todas las islas con esta misma finalidad, pero queda por concretar cómo se materializa el acuerdo en el caso de Ibiza.

Según explicó el citado conseller, el Govern pidió al Consell que se sumara a su iniciativa de ámbito balear, aportando sus fondos al Ejecutivo regional para luego repartirlos entre las islas y ayuntamientos. Sin embargo, el Consell ibicenco alegó que ya había ideado este sistema por su cuenta mucho antes y que ya tenía todo el mecanismo perfilado y pactado con los ayuntamientos, por lo que ha pedido al Govern que sea él el que envíe su aportación al Consell para sumarla al fondo ya creado.

De hecho, el equipo de gobierno reiterará ahora esta petición al Ejecutivo de Francina Armengol. «Nosotros no queremos que el dinero haga un camino de subida, sino de bajada. Si acaso, que nos envíen ellos su dinero», manifestó Losa. Para evaluar la cuantía de las ayudas se tendrán en cuenta una serie de factores, como el hecho de que el negocio o actividad afectada funcione todo el año, si tiene trabajadores en situación de ERTE u otro tipo de características.