La sociedad de garantía recíproca ISBA ha aprobado un total de 478 operaciones para inyectar liquidez por importe de 59,7 millones de euros a pequeñas y medianas empresas (pymes) y autónomos de Balears a través de la línea extraordinaria creada por el Govern y esta entidad.

La conselleria balear de Hacienda informó ayer en una nota de prensa que, en la distribución por islas de las solicitudes aprobadas, el grueso corresponde a Mallorca, con 383 operaciones, por un importe de 50,1 millones; en Menorca se suman 47, por un valor de cerca de cinco millones de euros, y en Ibiza y Formentera, 48, por un importe de 4,6 millones.

Ante la situación de emergencia actual se ofrece y se aplica otra medida consistente en que en el caso de las operaciones de financiación que ya tenían previamente un aval de ISBA, se puede solicitar aplazar el pago (entre seis meses y un año) de la amortización de esta deuda.

En este sentido, el ISBA ha aprobado 197 operaciones de aplazamiento de deudas de préstamos anteriores, por un importe global de 22,3 millones de euros. Por islas, la mayoría de solicitudes corresponden a Mallorca, donde se han aprobado 179, por importe de 20,5 millones de euros; mientras que 12 operaciones corresponden a Ibiza y Formentera, por un importe de 1,15 millones; y seis operaciones a Menorca, por cerca de 680.000 euros.

Con todo, y volviendo a la línea extraordinaria del Govern y el ISBA, cuyo objetivo es inyectar liquidez a pymes y autónomos, la conselleria de Hacienda y Relaciones Exteriores indica que, además del total de 478 operaciones ya aprobadas, actualmente se están tramitando otras 1.292 solicitudes, que suman un importe de 111,4 millones de euros.

Respecto a la función de esta línea extraordinaria, la conselleria recuerda que pone actualmente al alcance de pymes y autónomos una financiación de hasta 100 millones, según la última ampliación aprobada por el Consell de Govern el pasado 24 de abril.Si bien, matiza, se trabaja con la previsión de hacer nuevas ampliaciones, hasta llegar a 200 millones, como explicó hace dos semanas la consellera balear de Hacienda y Relaciones Exteriores, Rosario Sánchez, en el Parlament.