Balears entra desde hoy en estado de alarma con más de un millón de personas confinadas. Desde hoy se ha decretado el cierre de todos los establecimientos comerciales así como restaurantes, bares o lugares de ocio a excepción de comercios de alimentación, farmacias, estancos o bancos, que permanecerán abiertos; y a partir de mañana entrarán en vigor las restricciones a salir a la calle. Sólo se podrá circular por la vía pública para ir a comprar productos alimentarios y de primera necesidad, para desplazarse al trabajo o para volver a casa.

El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, anunció ayer pasadas las nueve de la noche las medidas que incluirán el estado de alarma activado para frenar la propagación del coronavirus en todo el país, donde ayer se alcanzaban los 6.000 infectados y cerca de 200 muertos. En Balears son ya 44 positivos y un fallecido. Las medidas buscan garantizar el distanciamiento social y evitar que siga creciendo la curva de contagios y que colapse el sistema sanitario.

De esta manera, los ciudadanos de las islas deberán confinarse en su casa durante quince días a partir del lunes en una medida sin precedentes. Desde mañana sólo podrán transitar por la calle para ir a comprar productos básicos, para ir a trabajar, para el cuidado de personas mayores, menores y dependientes o para acudir a centros hospitalarios. También podrán acudir al banco en caso de necesidad. Todos estos traslados sólo podrán hacerse de manera individual. No podrán salir a pasear o acudir de visita a casa de amigos o familiares.

Se podrá circular en coche en los mismos supuestos o para acudir a repostar a las gasolineras, si bien podría cerrarse el acceso de algunas carreteras o calles, según detalló el presidente del Gobierno.

Y desde hoy mismo quedan cerrados todos los establecimientos comerciales a excepción de comercios de alimentación -desde grandes superficies a colmados- que garantizarán el abastecimiento, farmacias, tiendas de productos ortopédicos, estancos, puntos de compra de prensa, de productos tecnológicos, tintorerías, peluquerías, establecimiento de comida para animales y oficinas bancarias.

De esta manera, después de haberse suspendido las clases en todos los ciclos educativos, de haberse prohibido grandes eventos y de haberse cerrado por parte del Govern instalaciones deportivas, gimnasios, salas de fiesta y discotecas, se suman bares, cafeterías y restaurantes y todos aquellos comercios que no están entre las excepciones. Los restaurantes y cadenas de alimentación podrán mantener sus servicios de comida a domicilio.