El expresidente del Consell de Formentera, Jaume Ferrer (GxF), ha defendido este viernes ante el Juzgado de Instrucción número 12 la utilidad de las encuestas de satisfacción turística, uno de los aspectos por los que se ha reactivado el 'caso Contratos'. Así, ha censurado tener que hacer "el paripé" ante los juzgados de Palma.

En declaraciones a los medios de comunicación, Ferrer ha lamentado haber tenido que venir a declarar pues considera que la única pretensión del PP de ponerle una querella es "instrumentalizarla políticamente" y sacar "rédito electoral".

"Se querellan contra mi persona cuando no he formado parte nunca del Patronato de Turismo, que era el que formalizaba los contratos", ha indicado antes de asegurar que "todos" los trabajos se hicieron y que, sobre este asunto, él no ha firmado "ningún" contrato.

En este sentido, ha dicho que las contrataciones son "correctas" y que se hicieron "a precio de mercado". Así, ha remarcado la importancia de las encuestas para poder tener un "barómetro de satisfacción del turista en Formentera", un sector fundamental en la Isla.

Una "exposición pública del trabajo2 ante "todo el sector turístico"

De esta manera, ha explicado que tras terminar la temporada turística y una vez finalizadas las encuestas, "se convocaba a todo el sector turístico" de la Isla porque se llevaba a cabo una "exposición pública de este trabajo".

Sobre que se le haya hecho declarar como máximo responsable de la institución insular, ha explicado que "por esta lógica tendría que estar declarando Francina Armengol", la presidenta del Govern.

El 'caso Contratos' investiga la posible adjudicación irregular de diversos contratos a un exasesor político de MÉS, Jaume Garau. Había quedado archivado en marzo de 2019 pero se volvió a activar a principios de este año tras una querella del PP.

Precisamente, Jaume Garau, exjefe de la campaña electoral de MÉS per Mallorca en 2015, ha defendido hoy ante el Juzgado de Instrucción número 12 de Palma los "resultados espectaculares" de las cuatro contrataciones por las que se reiniciado el llamado 'caso Contratos', que investiga presuntas irregularidades en su adjudicación.

En declaraciones a los medios de comunicación tras su declaración, Garau ha explicado que son "cuatro contratos con cuatro administraciones diferentes, gobernadas por cuatro partidos políticos diferentes y con cuatro informes jurídicos que destacan que todo se ha hecho según los procedimientos legales".

"Hemos vuelto a explicar esto, una vez mas, después de tres años y tres citaciones judiciales", ha manifestado. "Estamos siempre encantados de explicar lo que haga falta para que no haya ningún tipo de duda", ha reivindicado. Tal como ha destacado, "son unos trabajos muy bien hechos, con unos resultados muy positivos y bien contratados". "No hay más, la verdad se acabará imponiendo", ha dicho.