Agentes de la Policía Nacional de la comisaría de Ibiza arrestaron el pasado martes en el puerto de Ibiza a un hombre de 37 años de edad con casi mil pastillas de éxtasis, informó ayer el Ministerio del Interior. La detención se produjo durante una inspección de personas y equipajes que llevaron a cabo en el puerto los agentes de la Policía Nacional.

Según la información policial, durante el examen de los pasajeros los investigadores de la comisaría observaron que uno de los pasajeros podría tener vinculaciones con el tráfico de drogas. Por este motivo los agentes decidieron comprobar el equipaje de esta persona, donde encontraron escondidas entre sus pertenencias un total de 903 pastillas de éxtasis y 32 gramos de cristal. Los agentes arrestaron a este pasajero por la presunta comisión de un delito contra la salud pública en la modalidad de tráfico de drogas.

Desde la comisaría explicaron que «la peculiaridad de estas sustancias estupefacientes, tales como el MDMA y las pastillas de éxtasis, es que son fáciles de esconder y transportar debido al poco espacio que ocupan». La Policía Nacional también anunció ayer que, de cara a la próxima temporada turística, se tiene previsto aumentar el número de controles policiales.

También subrayaron desde el Ministerio del Interior que «es habitual utilizar los meses que no son de máxima ocupación para la introducción de sustancias estupefacientes, con el fin de hacer acopio de una cantidad suficiente en previsión de la demanda esperada». Por este motivo, señaló la Policía, «se ha puesto en marcha el plan operativo de respuesta policial al tráfico minorista y consumo de drogas en zonas, lugares y locales de ocio, así como en medios de transporte, con la finalidad de ofrecer una respuesta eficiente y reducir o prevenir estas conductas ilícitas que se acentúan con la proximidad de los meses de máxima ocupación en la isla». De esta forma, dijo comisaria, «se mitigan las fatales consecuencias que se derivan del tráfico de drogas, como pueden ser, entre otras, conformación de guetos en torno a la venta de estas sustancias, peleas y reyertas, accidentes de tráfico, intoxicaciones, la drogadicción juvenil».