A partir de ahora, los 10 concejales de la oposición en Sant Josep y los dos del equipo de gobierno que no tienen una nómina (los tenientes de alcalde Ángel Luis Guerrero y Pere Ribas, que es también portavoz de Unidas Podemos) cobrarán 100 euros más por cada comisión informativa del pleno a la que asistan. Esta cuantía se sumará a los 800 euros mensuales que ingresan en este mandato, en una especie de «tarifa plana», por su participación en los plenos y dichas comisiones, sean las que sean. Los dos miembros del equipo de gobierno también cobran, aparte, dietas por asistir a las juntas de gobierno o mesas de contratación.

El Ayuntamiento de Sant Josep estimó ayer en un pleno extraordinario, con el voto en contra del PP (la concejala de Vox, Pino Vidal, no estuvo), la alegación presentada por el concejal de Proposta per Eivissa (PxE), Vicent Torres, contra el presupuesto de este año porque prevé la tarifa plana apuntada cuando las bases de ejecución especifican que el pago de dietas será por «asistencia efectiva» a las comisiones y plenos.

Torres ya reclamó en julio que se pagara por asistencia a cada acto, como se hacía en el pasado mandato (presentó un recurso contra el acuerdo de pleno del día 3, pero el Consistorio aún no ha respondido y el concejal no ha acudido a la vía judicial), porque considera «una discriminación» que todos los ediles cobren lo mismo aunque algunos participen en más comisiones que otros. Los grupos con sólo un concejal, como PxE, Vox y Ara Eivissa, tienen que asistir a todas las comisiones, mientras que los de Cs, que son dos, pero, sobre todo el PP, se las pueden repartir.

«Un instrumento de guerra»

«Un instrumento de guerra»

El interventor ha emitido ahora un informe favorable a la alegación de PxE, lo que ha forzado al equipo de gobierno a aceptar el pago de los 100 euros, el mínimo previsto, por asistencia a cada comisión informativa. De todos modos, el concejal de Hacienda, Vicent Roselló, abroncó ayer a Torres, al que acusó de impugnar el presupuesto de este año de forma «imprudente y temeraria, con una falta de lealtad sin precedentes en el Ayuntamiento» para «cobrar más cada mes».

Con la alegación de PxE se ha retrasado la entrada en vigor del presupuesto (el pleno aprobó su aprobación definitiva), «un mal irreversible», según Roselló, que también recriminó a Torres que hubiera hecho uso del presupuesto como «instrumento de guerra». También destacó que, aparte del informe del interventor, se aceptaba su alegación para que «no continúe haciendo un mal» al Ayuntamiento.

Roselló recordó a Torres que en el pleno en el que se aprobaron las retribuciones no votó en contra sino que se abstuvo. «Creo que no me abstuve aunque el acta lo diga», le rebatió el concejal de PxE pese a que en cada pleno repasa hasta las comas de las actas de las sesiones anteriores (para su aprobación). «Puede que me saltara esto», agregó cuando la secretaria advirtió de que dio su consentimiento al acta.

Enfrentamiento de la derecha

Enfrentamiento de la derecha

Torres recalcó que no entendía «la pataleta» de Roselló y recordó que se ha limitado a usar «las herramientas que otorga la legislación» y no «ningún elemento de guerra». Acto seguido, el concejal de PxE recalcó que no tenía ninguna culpa sobre el retraso en la entrada en vigor del presupuesto y que, si acaso, era responsabilidad del equipo de gobierno porque en julio «no hizo caso» a su recurso. Al reclamarlo ahora por la vía de los presupuestos, el equipo de gobierno se ha visto obligado a pedir un informe jurídico y, al ser favorable a la reclamación de Torres, a aceptarla.

El portavoz del PP, Javier Marí, arremetió contra el concejal de PxE, al que echó en cara que para él acudir a los plenos o a las comisiones informativas sean «un suplicio». «Yo entiendo que la política es otra cosa. Una cosa es que no te cueste dinero de tu bolsillo y otra que sea un suplicio acudir a las comisiones», remarcó. Los dos grupos de la derecha mantuvieron un rifirrafe en el que Torres dijo que «a los concejales que son funcionarios [Javier Marí] o consellers [Vicent Roig] no les descuentan el dinero de la nómina por acudir a los plenos o las comisiones». Los aludidos recordaron que la ley ampara la participación en cualquier órgano colegiado de una Administración sin que suponga la merma del sueldo de ningún trabajador. «No me lo quitan», rebatió Torres, «pero luego tengo que hacer el trabajo que no he hecho». «¿Y en el Consell no?», cuestionó Marí.

Apoyo de Cs y Ara Eivissa

Apoyo de Cs y Ara Eivissa

El portavoz de Ciudadanos, Dani Becerra, apoyó la propuesta de PxE y destacó que se trata de recuperar lo que «se hacía históricamente» en el Ayuntamiento. Criticó que no se hubiera consensuado «la tarifa plana de 800 euros» y recordó que el equipo de gobierno aumentó en un 25% su coste en salarios. «No pongan el grito en el cielo por que se vuelvan a pagar las comisiones informativas», dijo, al tiempo que destacó el recorte que sufrió la oposición. «Al alcalde le sentó mal que hubiera tanto grupo y decidió darle a la tijera», añadió.

El concejal de Ara Eivissa, Josep Antoni Prats, que también se posicionó en favor de la alegación de PxE, subrayó que este debate le incomodaba. «No tienen sentido las feroces críticas contra Torres por presentar una reclamación cuando el informe del interventor le da la razón ni tampoco los reproches entre unos y otros. Hay postureo por parte de todos», dijo. «Se ha de valorar mínimamente el trabajo que se hace y no ha de ser un sacrificio venir aquí. Cien euros no es demasiado exagerado oyendo las cosas que oímos por ahí», añadió.