El silencio es el ruido más fuerte, quizás el más fuerte de los ruidos (Miles Davis).

En el trayecto de vuelta de Cala d'Hort hacia es Cubells, la perspectiva de la costa austral de Ibiza que se vislumbra desde la carretera resulta tan imponente que quita el aliento. Sobre un campo verde salpicado de almendros, algarrobos y matas de hinojo se alinean tres cabos. En primer lugar la Punta de Porroig, con el acantilado almagre de sa Penya Roja, que contrasta con el pinar y los chalets que se arremolinan en la cima; a continuación la de es Jondal, con su ojal pétreo en mitad del promontorio, y por fin el macizo del Cap des Falcó, extremo del Parque Natural de Ses Salines y de la propia isla. Y aún más al sur, el brumoso perfil de Formentera y los islotes de es Freus.

Entre el cielo y la tierra, en el ecuador de la postal, un dilatado edificio blanco se asoma entre el verdor. Parece concebido para que sus moradores gocen eternamente con la contemplación del paisaje. Quien continúa hasta el pueblo y cruza entre la iglesia y el Bar Llumbí por una carretera que se asoma al precipicio, pronto vislumbra la fachada delantera de esta construcción.

Su cuerpo central se eleva por encima de las dos alas, con un óculo en mitad de la planta superior y una sencilla espadaña como remate. También hay una hilera de vanos por planta, con contraventanas de color verde, a juego con la naturaleza. Según a qué horas, Santa Teresa parece cerrado a cal y canto, pero lo habita y mantiene una pequeña comunidad de carmelitas misioneras, orden que regenta el inmueble desde que abrió sus puertas, en 1961. Basta con llamar al timbre. Aunque recibe el nombre oficial de Casa de Espiritualidad Santa Teresa, la mayor parte de los ibicencos lo conoce como Seminario de es Cubells. Antaño, incluso lo frecuentaban los fines de semana para disfrutar de su cocina casera, a precios populares, en el mismo comedor que aún perdura.

Resulta insólito que el alojamiento probablemente más económico de Ibiza aguarde en tan excepcional ubicación. Las diecisiete habitaciones del ala izquierda no se diferencian de las de cualquier hotel. Tienen baño privado, mobiliario estándar y conexión wifi, aunque su mayor atractivo, tal y como dicen las hermanas, son el cielo, las estrellas y el mar. Las treinta estancias del otro lado aún son las originales, mucho más austeras y con baño compartido. En el comedor se sirven desayunos, almuerzos y cenas, a petición de los clientes, y, en base a este mismo protocolo, disponen de servicio de habitaciones. También hay salas de reuniones y una capilla, y los alrededores ofrecen paseos inolvidables.

Orientación social

En contra de lo que cabría esperar, lo mismo atienden a religiosos y seglares de retiro espiritual que a familias de vacaciones -niños incluidos-, deportistas que vienen a participar en competiciones, coros que ensayan en la capilla y pernoctan e incluso trabajadores de temporada. Estos últimos encuentran aquí una solución inesperada al acuciante problema de la vivienda. La hermana Gracia Navarro, la directora, afirma que sus modestos precios se establecen en función de las necesidades de cada huésped y que incluso tienen una orientación social. De hecho, un trabajador que va a estar una temporada larga paga menos que alguien que se aloja tan solo unos días.

Prácticamente se trataría de un hotel al uso, si no fuera por un detalle fundamental: Santa Teresa es una casa de silencio. «Nosotras estamos para ayudar, servir y orar. Si la persona no necesita nada, no nos metemos en su vida. Algunos, cuando se marchan, nos dicen que han recuperado la tranquilidad que habían perdido». No se admiten, por tanto, juergas, ni reuniones de amigos en las habitaciones ni otra clase de discordancias. Únicamente, el estrepitoso silencio de la naturaleza.

Aquellos arriesgados ibicencos

El Seminario, junto con la iglesia de Es Cubells, surgió gracias a la semilla plantada durante su estancia por el sacerdote catalán Francesc Palau (1811-1872), fundador de la orden de las hermanas y hermanos carmelitas. Actualmente lo regentan Gracia, María Ángeles, Rosie y Carmen. Esta última, con un cuarto de siglo de estancia en es Cubells, es la más veterana en la casa. Gracia ha recorrido buena parte de España dirigiendo colegios de la orden y se ocupa de la administración del establecimiento, que van mejorando según pueden. Ahora están acabando de remodelar la cocina y planean, de acuerdo con el Obispado, convertir la planta baja del ala derecha en un albergue moderno con literas, para los jóvenes. Turismo a contracorriente, y por muchos años.

Xescu Prats es cofundador de www.ibiza5sentidos.es, portal que recopila los rincones de la isla más auténticos, vinculados al pasado y la tradición de Ibiza.