Marc Rahola Matutes (Barcelona, 1974) recibió la noche del pasado miércoles en Barcelona el premio a la Mejor Estrategia Empresarial en la gala de los I Premios a la Excelencia Empresarial de elEconomista.
Este galardón premia la labor de este ya prestigioso empresario ibicenco en el último lustro al frente de su holding, OD Group, con intereses en la hostelería (cinco hoteles bajo esta marca y tres más bajo la de Ryans), la inmobiliaria (White Angel) e incluso en el sector primario, al ser ya uno de los mayores productores de almendras de España, sino ya el mayor, con una plantación en tierras de Aragón y Cataluña (Ocean Almond).
La constante del cambio
La constante del cambio
Rahola, un día después de recibir el premio en un acto celebrado en Barcelona, explica en conversación telefónica a grandes rasgos que la política que aplica a sus negocios, y que le ha valido este reconocimiento, se basa en la constante del cambio: «Todos nuestros negocios están en crisis constante porque estamos en un mundo en movimiento incesante».
«Nuestros productos son dinámicos y siempre están innovándose, se metamorfosean», añade Rahola, para apuntar lo que, a su juicio, es una de las claves de su éxito: «Estos condicionantes obligan a funcionar con una estructura transversal, más ágil, con equipos multidisciplinares en los que el rol de líder cambia según el producto y el momento del mercado». Por este motivo, Rahola apunta la mayor parte de este éxito a sus equipos: «No es un tópico, sin ellos no podríamos funcionar así y no tendríamos éxito».
El empresario recuerda que la tecnología condiciona todos los ámbitos sociales, por supuesto el empresarial: «El problema es que lo que hoy funciona, mañana no tiene éxito. Todos los negocios están sujetos a los cambios constantes que vivimos, a un ritmo además frenético, y por eso trabajamos con equipos ágiles; en este mundo donde la tecnología es tan disruptiva, ya no vale tener estructuras grandes y rígidas», insiste.
La actualidad empresarial pasa por un «movimiento constante, con productos dinámicos que cambian. Y tenemos que adaptarnos como empresarios», advierte Marc Rahola.
