Los consells de Ibiza y Formentera, así como el Ayuntamiento de Sant Antoni, se encuentran entre las 33 entidades locales de Balears que no han rendido cuentas del ejercicio económico del año pasado ante la Sindicatura de Comptes dentro del plazo previsto, que finalizaba el pasado martes. En su conjunto, el 43,4% del total de entidades locales de la Comunitat Autònoma (afecta al 42,3% del total del presupuesto inicial consolidado de gastos para el ejercicio 2018 de todas las instituciones de las islas), ha eludido este trámite, que es de obligado cumplimiento y que puede acarrear el pago de sanciones o la retención de los ingresos que corresponden a cada entidad por su participación en los tributos del estado. Los municipios que no han presentado sus cuentas, entre los que destaca el Ayuntamiento de Palma (en Ibiza sólo Sant Antoni), representan el 52,6% del total de la población de Balears.
Los presupuestos de las tres instituciones pitiusas a las que la Sindicatura de Comptes da un tirón de orejas por incumplir el plazo previsto de presentación de las cuentas que gestionaron el año pasado ascienden a 153 millones de euros: 100,6 millones en el caso del Consell de Ibiza, 26,8 millones del Consell de Formentera y 25,6 millones del Ayuntamiento de Sant Antoni.
La consecuencia más importante de que estas administraciones hayan eludido este trámite es el hecho de que no permite la fiscalización de la actividad pública que tienen encomendada por ley los órganos de control externo (Tribunal de Cuentas y Sindicatura de Comptes).
En caso de incumplimiento, la normativa contempla diversas medidas coercitivas, como la posibilidad de retener los ingresos que corresponden a cada entidad por su participación en los tributos del Estado, la comisión de una infracción muy grave en materia de gestión presupuestaria y la correspondiente sanción, así como un incumplimiento del deber de colaboración con los órganos de control externos, cuyas consecuencias están tipificadas en el Código Penal.
La Sindicatura de Comptes ha advertido este año a las entidades locales hasta en tres ocasiones (el 23 de abril, el 1 de julio y el 2 de septiembre) de los plazos estipulados para cumplir el deber de rendir la cuenta general de 2018.
La Sindicatura de Comptes informó de que enviará requerimientos a todas las corporaciones que no han presentado la cuenta general del ejercicio 2018 (el Consell de Ibiza, por ejemplo, aprobó su cuenta general en el último pleno) con la advertencia de las consecuencias económicas y penales que puede tener este incumplimiento.
