Minutos antes de las 19 horas del viernes, el Club Diario empezaba a dar la bienvenida a los asistentes más puntuales a la gala de los Premis Diario de Ibiza. El alcalde de Sant Josep, Josep Marí Ribas, fue uno de los que llegó con puntualidad británica. E incluso antes. Pero para evitar que lo tacharan de algo tan poco español, reconoció haberse hecho el remolón por los alrededores del Diario de Ibiza para ganar tiempo al tiempo.

Su homólogo en el cargo, pero en territorio norteño, Antoni Marí Marí, Carraca, hizo su entrada poco después, por lo que los dos ediles se unieron, en espacio y conversación, para enfrentarse juntos a esos primeros minutos difíciles antes de romper el hielo en un evento al que se acude solo. La que llegó, a toda prisa y con energía, pensando que ya lo hacía tarde, fue la consellera balear Pilar Costa, que se sumó a la conversación de los ediles de Sant Josep y Sant Joan.

El senador y presidente del Partido Popular, José Vicente Marí Bosó, logró entrar esquivando el photocall con gran maestría. Su compañero de batallas, el candidato al Senado por el PP, Jacobo Varela, tuvo que enfrentarse solo a la cámara y al flash con un poco de pudor inicial. Pudor que luego se le olvidó cuando posó, momentos antes de iniciar el cóctel, junto al presidente del Consell de Ibiza, Vicent Marí, a los alcaldes Antoni Marí y Carmen Ferrer, y al presidente de los populares, Marí Bosó.

La portavoz de Podemos, Viviana de Sans, llegó a las instalaciones del Club Diario pasadas las 19.30, vanagloriándose de su puntualidad. La pena es que su hora de referencia distaba mucho de la hora real del inicio del acto, por lo que tuvo que entrar en la gala ya con las luces apagadas y a poco de darse por inaugurada la cita.

Los jardines de Diario de Ibiza acogieron el cóctel posterior a la gala. Un momento más distendido en el que se constató que la campaña de unas nuevas elecciones generales está cerca y que el ambiente, en algunas formaciones, no está para mucha fiesta. Así que la clase política optó por hacer caso del refrán aquel que dice 'cada oveja con su pareja' y evitar revolotear de un lado para otro. Las representantes de Podemos, De Sans y la concejala de Vila Claudia Cotaina, no se separaron ni un momento, al igual que el tándem naranja formado por el conseller Javier Torres y el concejal de Vila y responsable del Colegio de Aparejadores, José Luis Rodríguez, ambos de Ciudadanos.

Mientras, un distendido Abel Matutes, empresario y exministro, asistió a la gala de los Premis Diario de Ibiza y no dudó en lanzarle una regañina, tan de progenitor, a la alcaldesa de Santa Eulària, Carmen Ferrer: «Por favor, no adelgaces más», le espetó.

Fotografías durante el cóctel

Los representantes socialistas, por su parte, se hicieron fuertes en un corro al que se le sumó el director de la Administración del Estado en las Pitiusas, Enrique Sánchez. El diputado balear Enric Casanova, que el pasado lunes asumió el papel de portavoz de la FSE-PSOE, tras la dimisión de Vicent Torres, cariacontecido, parecía temer el momento en el que alguien pronunciase la tan inocente, y peligrosa a la vez, pregunta de ¿qué tal, cómo va? La consellera del Govern Pilar Costa aceptó abrir el corro infranqueable de los socialistas para hacerse una foto con el tándem de Ciudadanos. «Pero primero nos hacemos una foto solo nosotros [los socialistas]», apostilló.

Y, mientras las copas se vaciaban y el cortador de jamón apuraba las últimas lonchas, los invitados empezaron a despedirse. A los populares, que fueron de los primeros en retirarse, les siguieron los de Ciudadanos y, por último, los socialistas y las representantes podemistas. Eso sí, Carmen Ferrer y Antoni Marí fueron los que exprimieron hasta el último momento el cóctel, sin temer a inocentes preguntas.