«Extremar la prudencia» ante el bloqueo político estatal, las incertidumbres económicas y la ralentización del crecimiento es la premisa con la que el Govern gestiona el presupuesto de 2019 y prepara las cuentas públicas de 2020, sostuvo ayer la jefa del ejecutivo, Francina Armengol.

La presidenta del Govern compareció en el pleno del Parlament para exponer su posición sobre la necesidad de mejorar la financiación de Balears para afrontar el futuro con garantías y dar cuenta de la situación actual de las arcas públicas, que obliga a realizar ajustes del gasto «sin comprometer la mejora de los servicios públicos esenciales y los objetivos estratégicos».

Armengol pidió a los grupos un compromiso común para reclamar la mejora de la financiación de las autonomías y ha incidido en la importancia de que la percepción de los fondos procedentes del Estado no esté a expensas de la inestabilidad política coyuntural.

«No puede ser que nuestra sanidad y nuestra educación dependa de si hay gobierno en Madrid o de si está en funciones o no», subrayó para defender un cambio en la Ley de Financiación.

Armengol puso el acento en que el problema de fondo de la insuficiencia de los recursos económicos de la administración regional es una falta de financiación «histórica», que es la causa de 5.000 de los 9.000 millones de euros de deuda de Balears y que tiene su origen en que «la descentralización administrativa no se ha acompañado de la descentralización de los ingresos».

Así, Balears es la segunda comunidad en aportación relativa a las arcas estatales y la novena en percepción de la caja común, a pesar, además, de los perjuicios de la insularidad y del crecimiento demográfico, que supone una presión extra sobre los servicios públicos a la que se añade, además, la población flotante turística, planteó la presidenta.

Armengol ha indicado que, pese al incumplimiento de la regla de gasto en 2019 (una imposición estatal que considera injusta), la Comunidad sí se ajustó a los objetivos de déficit y deuda, y destacó el incremento de la inversión en sanidad, educación y servicios sociales durante la pasada legislatura.

En cuanto a la carencia de los 177 millones de euros comprometidos para este año debido al «bloqueo del Gobierno central», la líder socialista afirmó que tiene el compromiso de la ministra de Hacienda en funciones, María Jesús Montero, para abonarlos este año.

El líder del PP, Biel Company, replicó el planteamiento de Armengol: «Usted sola hunde el barco, culpa a los otros y ahora pide que todos juntos lo saquemos a flote».

Para el portavoz del principal grupo de la oposición, el bloqueo de la formación del Gobierno es «un burdo chantaje de Pedro Sánchez al resto de partidos y a las Comunidades Autónomas» y la presidenta autonómica, en lugar de ser exigente, ejerce de «delegada del sanchismo».