La doctora en Biología Antònia Cirer y la activista Carmen Tur, respaldadas por diversos colectivos, impulsan la creación de una plataforma ciudadana ante la proliferación de especies invasoras como las serpientes. En sendos escritos presentados al Consell de Ibiza y a los cinco ayuntamientos de la isla, critican la «notable pasividad de las administraciones que tienen la obligación de hacer frente a este riesgo tan grave» y lamentan que todavía no se cuente con ningún control de las mercancías que introducen estas especies a través del puerto, como olivos para decoración, balas de paja o forraje.

Para explicar la dimensión de este problema, Cirer, que es experta en herpetología, recordó que las culebras de herradura que han invadido Ibiza están batiendo récords de tamaño en su especie. «La más grande encontrada en la Península medía 1,56 metros, mientras que aquí, en los últimos años, primero se encontró una de 1,70 metros, luego otra de 1,82 y ya se ha superado con una de 2,05 metros».

Como no cuentan con depredadores naturales en la isla, «estas serpientes pueden ir creciendo sin que se las coman y superando el tamaño a partir del que empiezan a ser una presa fácilmente detectable», explica Cirer. Por ello, además de los escritos presentados ante las instituciones de la isla, portavoces de este colectivo también han comenzado una ronda de entrevistas con representantes de cada ayuntamiento «para pedirles que actúen de una manera decidida con la finalidad de erradicar las serpientes, ya que son las especies invasoras que tienen más potencial para dañar nuestros ecosistemas», subrayan en su comunicado.

Como todas las serpientes están incluidas dentro del listado de especies invasoras en las Pitiusas, según un decreto del Ministerio de Agricultura de 2013, «se deben establecer todos los esfuerzos necesarios para garantizar su erradicación, tal y como indica el mandato de la Unión Europea».

Como primera medida, instan a los ayuntamientos y al Consell de Ibiza a que se dirijan de manera urgente a «quien tiene responsabilidad, competencias y obligación, es decir, el Gobierno de España y el Govern balear». El plan de erradicación que exigen debe empezar en la Autoridad Portuaria de Balears, para que evite la entrada de vegetación que pueda ocultar estas especies invasoras.

Cuarentena en el puerto

«Una cosa es la libre circulación de las mercancías y, otra muy diferente, que las que tengan un peligro potencial no estén sometidas a restricciones y control», explican en su comunicado. Por ello, proponen que «todas las mercancías agropecuarias pasen por una cuarentena y un control en es Botafoc, antes de entrar al resto de la isla». «Como ciudadanos ibicencos pediremos a los parlamentarios que nos representan fuera de las Pitiusas, a las instituciones baleares y las españolas, que hagan causa común», concluye este comunicado.

Cirer anunció que, tras la entrega de este escrito al Consell y a los ayuntamientos, la intención de este colectivo es crear una plataforma ciudadana o un movimiento de reivindicación social para que la Administración actúe de una vez contra la invasión de serpientes que sufren las Pitiüses. Por su parte, Carmen Tur comparó esta iniciativa con el Movimiento Pro Radioterapia en Ibiza, del que ella fue la principal portavoz.