El Ayuntamiento de Sant Josep usará astillas procedentes de la limpieza de los bosques de Ibiza para las calderas de biomasa de las piscinas municipales, lo que, según sus cálculos, supondrá un ahorro económico de más del 25% con respecto de las calderas convencionales de gasóleo

El Ayuntamiento de Sant Josep ha adjudicado el suministro de astilla de biomasa para los próximos dos años a una empresa que se compromete a suministrar material procedente de la limpieza de bosques locales, mediante planes de gestión aprobados por el Govern balear. Esta era una de las condiciones estipuladas al pliego de condiciones que tendrá que cumplir la adjudicataria, Ingenia Ambiente & Natura, según explica el Ayuntamiento de Sant Josep en una nota de prensa.

"Con este requisito, se pretende fomentar y potenciar el mantenimiento de las zonas forestales del municipio y de la isla de Ibiza, que es un punto clave en la prevención de incendios forestales, así como reducir el impacto ambiental de tener que transportar astilla de fuera de la isla”, destaca la concejala de Medio Ambiente de Sant Josep, Mónica Fernández.

330 toneladas de astillas

La estimación anual de consumo es de 330 toneladas de astillas y el contrato se ha adjudicado por un importe de 67.200 € anuales, que variará en función del consumo real de la caldera. Con el uso de astilla de biomasa, además de las mejoras ambientales, se produce un ahorro económico en el consumo de como mínimo un 25% respecto a una caldera de gasóleo tradicional.

Este contrato es una demostración más de que el Consistorio de Sant Josep quiere seguir trabajando en la incorporación de criterios medioambientales en la contratación pública para reducir el impacto de las actividad sobre el medio ambiente y dar ejemplo sobre las posibilidades y alternativas más sostenibles que existen actualmente, ya que la empresa se compromete a suministrar la cantidad necesaria para alimentar las calderas de la piscina municipal de Sant Josep, que varía a lo largo del año. De hecho, en invierno la demanda es tres o cuatro veces superior a la del verano, cuando ha empezado a operar esta empresa.

El acuerdo también fija las características que tiene que cumplir la astilla de biomasa (granulometría, densidad, humedad), apta para la caldera de biomasa que se puso en marcha en 2014 a las piscinas de Sant Josep y fue financiada con una ayuda del 80% por parte del Programa comarcal de las Pitiüses Leader. Además, la empresa se ha comprometido a ejecutar determinadas mejoras que garantizarán un mejor servicio y un mayor conocimiento del material suministrado. Para ello, se llevarán a cabo dos estudios para determinar la huella de carbono del transporte de la astilla hasta la caldera de biomasa y para determinar el ahorro de las emisiones de dióxido de carbono con respecto al uso de una caldera de gasóleo desde la puesta en marcha de la caldera de biomasa en 2014.

Asimismo, la empresa se ha comprometido a instalar una pantalla informativa en la entrada de la piscina para dar a conocer la existencia de la caldera de biomasa y los ahorros en emisiones de gases. Finalmente, la adjudicataria mejorará la granulometría de la astilla suministrada, hecho que permite un mejor funcionamiento de la caldera y un mayor aprovechamiento térmico del material.

Por último, el Consistorio de Sant Josep explica en el mismo comunicado de prensa que, mensualmente, se recogerá una muestra del material suministrado que se enviará a un laboratorio acreditado para analizar las características del material (densidad, humedad, poder calorífico, granulometría, cenizas, etc.). Los resultados de estas muestras permitirán conocer en detalle las características del material y servirá para acabar de definir la facturación, que depende en parte de la calidad del material.