El nuevo presidente del Consell de Ibiza, Vicent Marí, prevé que la institución insular asuma la construcción del nuevo parque de bomberos de sa Coma, presupuestado inicialmente en 7,2 millones, «con fondos propios y con la ayuda de la Comunitat Autònoma».

El anterior gobierno manejaba diversas alternativas para financiar esta infraestructura, entre ellas el uso de la ecotasa o que los ayuntamientos abonaran el 50% de su coste. «La voluntad es no cargar a los ayuntamientos con más costes», explicó ayer Marí tras la visita que hizo al parque de bomberos junto a su equipo de gobierno. Destacó que las nuevas instalaciones han de ser «una realidad en esta legislatura».

El anterior gobierno también planteó el año pasado a los ayuntamientos un nuevo convenio, que no se firmó, con un aumento de la distribución de costes del mantenimiento del parque de bomberos (4,4 millones al año), que suponía que el Consell asumiera 1,8 millones; Vila, 638.230 euros; Santa Eulària, 470.081; Sant Josep, 335.745; Sant Antoni, 324.843 y Sant Joan, 78.091. Los alcaldes, entre ellos Vicent Marí, apostaban por la mejora del servicio, pero mostraron sus reticencias al incremento de la carga económica. En 2017, los ayuntamientos abonaron 212.000 euros.

Ahora, Vicent Marí insiste en que, en principio, no es partidario de que los ayuntamientos paguen más por este servicio (pese a que es competencia de los municipios de más de 20.000 habitantes). «De entrada, prefiero que el Consell asuma lo que pueda. Se tendrá que estudiar. Si está bien planificado, todo el mundo colaborará porque saldrá beneficiado. Cada uno contribuirá con lo que pueda», dijo.

El nuevo gobierno de PP y Ciudadanos se citó en el Consell a las 8 horas para tener «un primer contacto». Posteriormente, el presidente y los seis consellers (falta el nombramiento del no electo que todo apunta a que será el exconcejal de Santa Eulària Salvador Losa) se desplazaron al hospital-residencia Cas Serres, el centro de menores Pare Morey en sa Coma y el parque de bomberos.

El flamante presidente reconoció que el parque de bomberos «se ha quedado pequeño». También se prevén dos subparques en la zona norte y oeste de la isla, cuya ubicación exacta se definirá junto a los ayuntamientos, para no concentrar toda la plantilla en un solo punto y «acortar los tiempos de respuesta» ante una emergencia».