Ibiza concluyó el mes de junio con un total de 3.304 personas sin trabajo, 45 menos que hace un año, lo que supone un descenso del 1,3%. Formentera, por su parte, tenía 136 desempleados apuntados a las listas del SOIB, ocho más (un 6,3% más) que hace un año, según los datos que acaba de publicar el Observatori de Treball del Govern balear. En la isla de Mallorca, con 236 desempleados menos (-0,8%), también se ha estancado esa estadística. Igual que en Menorca (2,6%), con sólo 56 parados más.

La mayor parte del descenso en Ibiza se produjo, como cabía esperar, en la hostelería (-86), mientras que la construcción sumó 37. Justo lo contrario sucedió en Formentera, donde se redujo el paro en el ladrillo (-10), pero creció en los servicios (+6), especialmente en el comercio (+7).

Las contrataciones laborales cayeron un 9,3% en Ibiza: se firmaron un total de 11.726, que son 1.208 menos que hace un año. En Formentera, la bajada fue porcentualmente mayor, del 12,9%, al rubricarse 876, unos 130 menos que hace un año. En ambos casos, la hostelería ha sido la mayor perjudicada: en Ibiza se formalizaron 832 trabajos menos en ese sector; en Formentera, 131. Una de las razones de ese descenso puede ser el incremento registrado los últimos años de fijos-discontinuos, con la consiguiente reducción de trabajos temporales.

De hecho, se dieron de alta 1.586 contratos indefinidos en junio en Ibiza, lo que supone el 13,52% del total. Se trata de un porcentaje que está por encima de la media balear (13,2%) y de la media nacional (8,7%). Sólo Madrid (14,7%) tiene una contratación fija mayor. Balears es la segunda en el ranking por comunidades autónomas.

«Estímulos»

«Estímulos»

Ante estos datos, la presidenta de la Confederación de Asociaciones Empresariales de Balears (CAEB), Carmen Planas, reclamó ayer «estímulos» que beneficien a la economía balear con el fin de frenar la pérdida de ritmo en la creación de empleo. «Los datos del mercado laboral -dijo- confirman que el ritmo de creación de empleo ha continuado moderándose en el mes de junio».

Por su parte, CCOO atribuyó los datos laborales a la «intensa» actividad turística, aunque alertó del aumento de la contratación temporal al ser ésta, según el sindicato, un reflejo de la estacionalidad de la economía balear. Alertó, además, de que el 26% de los demandantes de empleo en Baleares son trabajadores, un hecho que el sindicato considera fruto de las «malísimas» condiciones laborales y salariales de la clase trabajadora de las islas: «La ocupación que se crea es precaria y temporal, tener un trabajo es cada vez menos una garantía para poder salir de la pobreza y llevar una vida independiente», asegura el sindicato.