Agentes de la Policía Nacional han detenido a un ciudadano español de 32 años, M.A.L.B. como presunto autor de delitos de extorsión, estafa y coacciones cometidos durante el inicio de temporada estival, aprovechando la ocasión que brinda la escasez de vivienda en Ibiza y los elevadísimos precios, debido a la grandísima demanda que se genera por el incremento de personas llegadas a esta localidad en busca de trabajar los meses más calurosos del año, lucrándose por ello, tal y como publicó Diario de Ibiza en sendos reportajes la semana pasada.

El detenido se dedicaba a realizar okupaciones de bienes inmuebles junto con otra persona de nacionalidad española, J.C.O. , quién ha estado detenido en estas dependencias en dos ocasiones anteriores por hechos similares. Ocupaba los inmuebles y anunciaba en redes sociales la posibilidad de alquilar las habitaciones por un precio de 500 euros mensuales aproximadamente.

El alquiler de la vivienda se realizaba mediante engaño ya que publicaba que tenían disponibilidad y autorización expresa para formalizar dichos alquileres, dándose cuenta las víctimas días más tarde de que no era así ya que se trataban de viviendas ilegalmente okupadas.

Se pudo constatar que se aprovechaba de las necesidades de las víctimas, llegando a coaccionar a los habitantes a que les pagara más dinero para que pudieran acceder de nuevo al domicilio cambiando la cerradura sin motivo aparente alguno, así como solicitarles la cantidad de 50 euros adicionales en concepto de mensualidad para disponer de suministro de agua caliente.

Los residentes no disponían de intimidad alguna ya que esta persona accedía a las habitaciones cuando quería, utilizando tanto las pertenencias como haciendo uso de la cama. La situación se hacía insostenible y en la mayoría de las ocasiones estos hechos iban acompañados de amenazas intimidatorias.