¿Tiene ya claro el reparto de áreas?

Tengo un borrador hecho. No es definitivo. Hay un par de departamentos por concretar.

¿Va a reorganizarlas?

Habrá cambios. Por ejemplo, se creará alguna nueva y se eliminará alguna. Pero no habrá grandes modificaciones.

¿Tendrá alguna área Joan Torres? Se lo pregunto porque, al parecer, cuando negociaba con el PSOE primero no quiso ninguna, aunque luego pidió seis.

Llevará varias. Me ha hecho unas peticiones y las tenemos que estudiar.

¿Como las que pidió al PSOE?

¿Cuáles pidió al PSOE?

Movilidad, infraestructuras, agricultura, pesca, transporte y vía pública.

Más o menos va por ahí. La que no me ha pedido es Urbanismo. Ni él ni Ciudadanos. Tampoco me han pedido Gobernación. Serán algunas de esas, pero no todas.

¿Quién llevará Urbanismo?

Nosotros [PP].

¿Qué quiere hacer con el West?

Mejorarlo, remodelarlo. Cambiarlo en positivo. Queremos hacer una inversión pública para modificar la estética de la zona: modificar el pavimento, soterrar las líneas eléctricas, hacer cumplir la ordenanza de fachadas, para que estén ordenadas, limpias y acabadas...

¿Y cambiar el tipo de negocio, para que el de borrachera no sea el principal?

Sí. Es difícil, pero las medidas que se han tomado hasta ahora han servido para cerrar locales, no para que cambie el modelo de negocio. Cambiará cuando se dote a la zona de más seguridad, de más limpieza y se haga una inversión pública para modificar la estética de todas esas calles.

Eso lo dice cada nuevo alcalde que entra en el Consistorio, pero luego, nada de nada.

Pues yo lo haré. Voy a permitir que haya una colaboración público-privada en materia de seguridad. Eso no se quiso hacer el pasado mandato, a pesar de que el PP lo llevó varias veces a pleno. También bonificaremos fiscalmente a aquellos negocios que se animen a diversificar y no sólo sean bares, por ejemplo, abriendo una tienda durante el día. Hay que estudiarlo, pero esa es la idea.

Supongo que lo de la colaboración en materia de seguridad lo hace porque es consciente de que no hay suficientes policías.

Evidentemente. No hay bastantes. Y mientras no los haya, habrá que tomar medidas.

Habla de mejorar la seguridad, pero tiene las manos atadas para contratar a más agentes. ¿Cómo puede lograr ese objetivo sin más policías?

El problema que tenemos es que se van muchos de los que entran. Se pueden contratar más si se prescinde de algún puesto de trabajo del Ayuntamiento. Habrá que mirarlo. Otra forma de mejorar la seguridad es regularizando los horarios. Actualmente, el grupo especial de la Policía Local creado para el West no entra hasta medianoche. Quizás debería empezar antes, y ayudarse de la seguridad privada. Hay que hablar con el jefe de la Policía y los oficiales, estudiar cómo se hace actualmente y darle una vuelta de tuerca a todo.

Ya sabe que la Policía es un quebradero de cabeza para el equipo de gobierno, entre quien entre, sea del partido que sea.

Sé que es un área complicada. Soy consciente, pero algo hay que hacer, siempre en positivo, pues no queremos modificar todo lo que haya hecho bien el anterior equipo de gobierno. Y haremos esa colaboración con la seguridad privada. Diré a todos los empresarios del West que el Ayuntamiento apostará por esa zona para reconvertirla y mejorarla, pero quiero que se comprometan a mantener las puertas de sus negocios cerradas, a cumplir las ordenanzas, y a vigilar y controlar sus respectivas terrazas y clientes.

Joan Torres adelantó el pasado viernes que habrá «medidas correctoras» en la ZPAE (zona de protección acústica especial), de manera que algún día se puedan ampliar horarios. Eso suena a dar marcha atrás.

En absoluto. Si se amplían los horarios de las terrazas, algo en lo que los tres partidos estamos de acuerdo, será porque se han tomado medidas correctoras para disminuir el nivel de ruido. Para ampliar el horario ha de haber una justificación.

¿Es la voz de Joan Pantaleoni o de José Sala? ¿Tiene libertad de acción?

He tenido libertad de actuación para hacer el programa electoral, para hacer la lista de candidatos...

¿Incluso para la lista?

Absolutamente. No hay nadie impuesto. Sí recibí alguna recomendación un par de veces, y en todos los casos dije que no los veía en mi equipo. Siempre se me ha respetado. Nunca se me presionó, jamás. Lista y programa son 100% míos. No recibo presiones, sí consejos.

¿No tiene que rendir cuentas a nadie?

A nadie. No tengo mochilas de ese tipo. Soy libre de hacer lo que quiera. Sólo pensaré en el bien de Sant Antoni. De haber tenido presiones, no habría dado este paso.

«Persona que no es de fiar». «Incoherente». «Antepone el odio personal a los problemas del pueblo». «Su único objetivo es la venganza». Son algunas de las frases con las que Joan Marí Serra, presidente del PSOE de Sant Antoni, describió el viernes a su socio de PxE. ¿Usted se fía de Joan Torres?

Sí, me fio de todo mi equipo. Llevo dos años trabajando con Joan en el Ayuntamiento. Lo conozco bastante. Y no soy una persona desconfiada. Quizás quienes fallaron fueron los del PSOE-Reinicia, pues permitieron tener en su gobierno a una tránsfuga. No creo que Joan Torres sea quien tenga que recibir esos calificativos. Le he defendido incluso en debates, no porque ahora hayamos pactado. Si él salió del equipo de gobierno fue porque le habían fallado, sobre todo una persona de su máxima confianza [Cristina Ribas].

¿Torres ha jugado a dos bandas durante las negociaciones o usted daba por seguro que le daría su voto y que sólo hablaba con PSOE-Reinicia para hacerse de rogar y tenerlos en vilo?

Entiendo que fuera abierto y hablara con todos los partidos. Pero siempre fui muy optimista, vi que las negociaciones iban bien y que había buena sintonía.

¿Tenía la seguridad de que le daría el voto?

Jamás al 100%. Hasta que no se ha votado en el pleno? Aunque ya habíamos firmado el pacto. Pero no creo que jugara a dos bandas, sino que quería escuchar a todos.

¿No se asustó cuando el PSOE ofreció la cabeza de Cristina Ribas?

Pensé que por esa razón, PxE no rompería las negociaciones con nosotros. En el partido sí que observé inseguridad, pero no quise transmitirles todo lo que sabía. Les dije [a los compañeros del PP] que fueran cautos y mantuvieran la serenidad, pues de momento todo iba bien.

Además de ser teniente de alcalde, ¿qué mas ha pedido Joan Torres para cederle su voto? ¿Cargos de confianza? ¿Tendrá dedicación exclusiva?

Tendrá dedicación exclusiva, entre otras razones porque llevará varias áreas. Lo de teniente de alcalde no me lo pidió él. Se lo ofrecí yo directamente. A él y a José Ramón Martín, de Ciudadanos. Y les dije que si veían necesario poner algún cargo de confianza para ayudarles en sus áreas, se podría estudiar, no habría ningún problema.

¿Cómo solucionará los atascazos diarios, ese embudo, en las salidas y entradas a Sant Antoni?

Está pendiente la apertura de la ronda sur, desde la rotonda del Lidl hasta la gasolinera de la carretera a Cala de Bou. Sería una solución, pues abriría una nueva vía.

¿Y cómo se soluciona el atascazo que hay en el Urbanismo de Sant Antoni?

Ese es otro hueso duro. En la lista incluí, a propósito, a un ingeniero técnico Industrial, Javier Jiménez, para este asunto. Él llevará Urbanismo con el objetivo de desatascarlo. Posiblemente le acompañará un cargo de confianza para suplir la falta de personal en esa área. No hay ninguno pensado aún, pero se buscará a un profesional que conozca bien ese tema.

¿El problema en ese departamento es político, se necesitan más funcionarios, sobran algunos funcionarios, han pasado demasiados arquitectos por el Consistorio en los últimos años...?

Es una suma de todo eso. Se han ido técnicos por malestar, por ejemplo cuando hubo desavenencias por el chiringuito de Cala Gració. En cualquier área del Consistorio había malestar, y también en la Policía, provocado por una forma de trabajar del equipo de gobierno hacia el funcionariado que no era la adecuada. Ni se les cuidaba ni se tenía en cuenta sus opiniones. No se actuó como se debía con la gente más importante del Ayuntamiento, los funcionarios. Y el departamento de Urbanismo no fue menos. Allí, por cuestiones políticas, se priorizó demasiado el área sancionadora, en vez de sacar adelante obras, algo que habría sido beneficioso para la economía del Ayuntamiento y del municipio, y para que evolucionemos. Una de las maneras con la que mejoraremos el West es dando las licencias de obras que solicitan los hoteles para subir de categoría. A partir de ahora daremos prioridad a los hoteles a la hora de dar licencias de obras.

El pequeño comercio se muere en Sant Antoni

Serán una prioridad. Una cosa relacionada con ellos es la zona azul. Actualmente no hay rotación de vehículos porque es gratuita. Lo puedes dejar estacionado todo el día sin que la Policía te multe, pues no hay suficientes agentes. Lo primero que haremos este invierno es volver a instalar la zona azul de pago. Intentaremos que se tenga que pagar lo mínimo para que sea viable. No hay afán recaudatorio, sólo queremos que haya rotación para beneficiar al pequeño comercio, que se queja de que la gente no puede aparcar para comprar.

Habla de la reconversión del casco antiguo. ¿Can Bonet o es Pujolet se quedan tal cual están?

Allí habrá que mejorar el alumbrado, construir aceras? En el casco antiguo hay calles, como la de Santa Agnès, que están muy degradadas. Si se mejoran, serán un incentivo para que abran nuevos negocios. Nadie quiere invertir en una zona fea y sucia. En los barrios que me comentas, a lo mejor no hay que hacer una reconversión, pero sí una inversión en alumbrado, aceras, asfaltado y mobiliario, así como en soterrar líneas eléctricas. Y tengo el compromiso de Vicent Marí [próximo presidente del Consell] de que esta legislatura se ejecutará con celeridad la construcción de las rotondas de ses Païsses.

El anterior alcalde se empeñó hasta el último día en que no desembarcaran ni coches ni camiones en el puerto.

Es uno de los temas que hemos tenido que negociar. Hemos acordado con Cs y PxE que habrá que hacer una consulta popular. Yo quería abrirlo al tráfico, mínimo con turismos, pero ninguno de los otros partidos estaban de acuerdo. Así que cuando haya aprobada una ley de consultas populares, preguntaremos a los vecinos de Sant Antoni. El pueblo está muy dividido en este aspecto.