Los niños del colegio Poeta Villangómez se pusieron manos a la obra ayer para participar en la segunda edición del Medusa Art Festival, impulsado por el Ayuntamiento de Ibiza, junto a Tono Cruz. El reconocido grafitero, que está realizando un gigantesco mural en la cancha del colegio, contó, de 9.30 a 14 horas, con la ayuda de un gran número de pequeños artistas. «Desde primera hora de la mañana han comenzado a llegar los niños», comentó Tono Cruz, quien quiso destacar que considera muy interesante el proyecto, ya que los niños «se sienten protagonistas imprimiendo un sello de identidad a su colegio». «Los chicos se están portando súper bien, no me podían haber dado mejor espacio. Estoy trabajando con más de 50 niños de nacionalidades diferentes. Es una maravilla. Además, estoy recibiendo muchísimo cariño», aseguró Cruz, quien no quiso desvelar la temática de su obra «hasta el último momento», aunque sí adelantó que se trata de una figura que representa tanto a Eivissa como a su tierra, Canarias.

Un festival participativo

Junto al creador canario, Move, un diseñador gráfico de Benicarló que también participa en el proyecto y en el mismo colegio, se encontraba pintando un mural en un lado de la fachada del centro en el que, a día de ayer, se apreciaban con nitidez las letras de un gigantesco abecedario. Además, el artista ofrecerá un taller de serigrafía mañana en el CEPA Pitiüses, en el que hará que los alumnos estampen el diseño del cartel del festival ibicenco.

Nieves Vázquez, profesora de la asignatura de arte del centro, destacó que están encantados «de formar parte del proyecto», pues es una manera estupenda de acercar este tipo de arte a los niños, que también son «urbanos y de barrio». «Junto a los alumnos -de 1º a 6º curso-, hemos elaborado un muro con toda la información y noticias que hemos conseguido recopilar acerca de los 6 artistas que participan en el festival -HOSH, fundador del evento, Mono González, Move, Sebastián González, Suso33 y Tono Cruz», informó Vázquez. «Todos han tenido que aprender quiénes son antes de que vinieran», dijo.

Entre nervios y risas, los niños fueron dando forma a la misteriosa figura de Tono Cruz, la cual empieza a vislumbrarse desde el aire, mientras alguno de ellos, como Izan de 5º curso, descubría entre rodillos y pintura, su pasión por el arte.