Los taxistas de la isla se quedaron sin servicio de GPS durante más de ocho horas entre la tarde y la noche del jueves por «una caída del sistema», según el presidente de la Federación Insular del Taxi, Alejandro Cardell, que desconoce las causas que provocaron el fallo. «Estamos esperando un informe de la empresa. No había pasado nunca [desde principios de año los taxistas de Vila usan una nueva marca de GPS]. Estamos sorprendidos», reconoció. Las consecuencias de fallo del sistema aún se notaron ayer, ya que el servicio funcionó, aunque «no de forma perfecta», admitió Cardell. La temporada pasada también falló el sistema en varias ocasiones.

Durante la caída del servicio se tuvo que activar «el plan B», el sistema antiguo, el uso de la radio. «Las llamadas telefónicas [de demanda de taxi] entraban, pero no se introducían en el sistema. Y se tuvo que operar como se ha hecho toda la vida, con el uso de la radio y, con voluntad, ir sacando los viajes con la radio», explicó Cardell.

El presidente de la Federación Insular del Taxi y de la Asociación de Autónomos del Taxi de la Ciudad de Ibiza criticó que algunos taxistas, a los que se les cortó el servicio de GPS por su negativa a pagar una cuota no justificada, «se aprovecharan» de la emisora de radio, que «no pueden usar», para atender servicios que, según su criterio, no les corresponderían.

Pendientes del nuevo operador

Pendientes del nuevo operador

Hay que tener en cuenta que la asociación de taxistas mayoritaria de Vila aún no ha firmado el convenio con Vila para el uso del GPS y desde el pasado mes de octubre desoye la orden del Ayuntamiento de suspender este servicio. El Consistorio aún no ha dado el visto bueno a la documentación económica aportada por este colectivo porque no se aclaran algunos conceptos, según explicó el edil de Movilidad, Juanjo Hinojo.

En cambio, Hinojo anunció ayer, en un pleno extraordinario en el que se aprobó la concesión de 12 nuevas licencias de taxi fijas, que entre ayer o el lunes estaba previsto la firma del convenio con Nitax, que será el único operador que tendrá cobertura legal para prestar el servicio de GPS en el municipio. Ayer no se hizo, en todo caso.

La empresa aragonesa Nitax ya ha superado todos los controles previos de la Administración y está en disposición de prestar el servicio cuando un representante del Consistorio estampe su firma en el convenio. Acto seguido, el Ayuntamiento podrá actuar contra los taxistas que sigan operando con el GPS de la asociación de taxistas de Vila en el caso de que no legalice su situación. Cardell confía en «aclarar» las dudas que tiene el Ayuntamiento y firmar el convenio.

Por su parte, con la abstención del PP, el Ayuntamiento aprobó la concesión de 12 nuevas licencias de taxi fijas a un coste de entre 160.000 y 180.000 euros. Se trata de las 12 primeras de las 36 autorizaciones, que, según un estudio encargado por el Consistorio, necesita el municipio para cubrir con garantías la demanda de taxis. Las 12 licencias se asignarán a los asalariados con más antigüedad.

El concejal de EPIC, Antonio Villalonga, criticó que el precio de las licencias es «un poco exagerado», al tiempo que arremetió contra Hinojo por «la división y el daño» que ha causado en el sector por la falta de control. También apuntó al alcalde, al que acusó de «consentir los desmanes».

El concejal del PP Juan Flores lamentó la falta de previsión del equipo de gobierno para que estas 12 nuevas licencias pudieran operar ya esta temporada, crítica que Hinojo asumió. El edil dijo que de cara al próximo invierno habrá que plantear «un calendario de libranzas más amplio».

Para responder a Villalonga, el concejal de Movilidad echó mano de la ironía: «Si logra ser alcalde, llegará con su vara de mando y conseguirá unificar a todo el sector como el Rey Arturo unió a los reinos de Inglaterra. Si es capaz de hacerlo, abandonaré el leninismo y me afiliaré a su partido. Pero como no creo que ninguna de las dos cosas sucedan, no tendré que cambiar el pago de la cuota».