El discjockey Marco Carola, uno de los más importantes de los que actúan todos los veranos en Ibiza, se enfrenta al posible embargo de sus bienes y de los emolumentos que percibe por su trabajo, como consecuencia de la demanda que también ha interpuesto contra él la productora que le tiene contratado, It's All About The Music SL. El motivo de la denuncia judicial es el mismo por el que le ha demandado la discoteca Amnesia, es decir, anunciar una actuación en otra sala de fiestas diferente, Pacha, pese a tener firmado un contrato de exclusividad con el primero de los establecimientos.

Al igual que hizo Amnesia, la promotora que emplea a Carola ha interpuesto una demanda contra él por considerar que «ha incumplido tanto el contrato que tiene firmado con Amnesia como con nosotros», señaló el representante legal de It's All About The Music SL, quien lamentó la «ruptura traumática de relaciones» con el citado artista.

De hecho, la promotora musical reclama a Marco Carola una indemnización millonaria en concepto de daños y perjuicios ante los efectos que, según asegura, le ocasionará esta ruptura del contrato firmado con Amnesia.

Pero, además, la empresa para la que trabaja Carola ha decidido solicitar al juzgado que autorice la medida cautelar de embargarle tanto los bienes de que dispone como el salario que percibe como discjockey. El objetivo de reclamar este embargo preventivo es el de asegurar la existencia de fondos, en el caso de una eventual sentencia condenatoria cuando se resuelva el pleito por daños y perjuicios que se ha interpuesto en los juzgados ibicencos.

El discjockey deberá comparecer en los juzgados de Ibiza la próxima semana para asistir a la vista oral que se celebrará para decidir si se acepta o no el embargo solicitado por la empresa promotora. Los representantes de esta sociedad confían en que el juez resuelva sobre esta medida cautelar «en muy pocos días, tal vez en menos de una semana».

Tal y como anticipó este diario, los juzgados de Ibiza han prohibido la actuación que Marco Carola tiene prevista en la discotecha Pachá esta noche y que continúa anunciándose con total normalidad, pese a la orden judicial.

La prohibición impuesta a Carola es consecuencia de la demanda que interpuso Amnesia nada más ver que Pacha anunciaba para hoy la actuación en este establecimiento.

Para los demandantes (a los que ahora se ha sumado la promotora de Carola), tanto la propia empresa como el músico habrían incurrido en «un grave incumplimiento» del contrato firmado con el artista, que se expone a una posible sanción de 2,4 millones de euros si finalmente actúa en Pacha o en cualquier otro local comercial, dado que «esta es una penalización que viene pactada en el propio contrato», señaló el representante legal de Amnesia.

Ayer, Pacha declinó hacer cualquier comentario a este diario sobre el asunto.