La empresa aragonesa Nitax, con sede en diversas ciudades de la Península, está cerrando los últimos flecos con el Ayuntamiento de Ibiza para operar en el municipio el servicio de demanda de taxi por geolocalización (GPS), a través del teléfono o Internet. El Consistorio está a la espera de que esta empresa presente un documento para firmar «cuanto antes» un convenio que le faculte como operador del GPS en la ciudad.
Con ello, se pretende desbloquear la situación actual, que se arrastra desde hace más de dos años, en la que la Federación Insular del Taxi presta el servicio sin el amparo de un convenio ni, desde el pasado mes de octubre, el consentimiento del Ayuntamiento. Fue entonces cuando el Consistorio ordenó que la Federación del Taxi dejara de operar el GPS en el municipio al no haber firmado el convenio, aunque el gestor del servicio ha seguido funcionando igual desoyendo el mandato municipal.
Como no hay otro operador, el equipo de gobierno ha tolerado la situación a pesar de que, inicialmente, el concejal de Movilidad, Juan José Hinojo, dijo que iba a actuar contra el desafío de la patronal del taxi y llegaría «hasta el final». Las declaraciones del edil quedaron en nada. Optó por buscar con diálogo un acuerdo con los taxistas para la firma del convenio.
Desde hace meses, la Federación y el Ayuntamiento intercambian información, pero no han sido capaces de cerrar un acuerdo. Tampoco aclaran qué queda pendiente. El equipo de gobierno sostiene que está a la espera de que el colectivo de taxistas mayoritario aporte un documento para subsanar y aclarar algunas cuestiones y el presidente de la Federación del taxi y a su vez de la Asociación de Taxistas Autónomos de Ibiza, Alejandro Cardell, se limita a decir que «va como va». «Nosotros hemos aportado la documentación», agrega.
No obstante, según ha podido saber este diario, al haber un segundo operador (Nitax) dispuesto a prestar el servicio en la ciudad y cuya tramitación (para la firma del convenio) está mucho más adelantada, el Ayuntamiento no piensa esperar más. En el momento, que se cierre el acuerdo con Nitax, según las fuentes consultadas, éste será el gestor autorizado del GPS del taxi en la ciudad, y el Ayuntamiento, con la prestación del servicio garantizado, «endurecerá» su actuación para evitar, mientras no firme el convenio, el funcionamiento del sistema de atención de llamadas de la Federación del Taxi. El reglamento municipal contempla la posibilidad de que puedan operar más de un GPS en Vila.
El presidente de la Federación del Taxi de Ibiza, Alejandro Cardell, culpa al Consistorio de la situación actual, que, subraya, se remonta a «hace algo más de dos años» y destaca que al gobierno municipal «le iba bien», hasta que empezaron las presiones por el impago de las cuotas del GPS de un grupo de 12 taxistas (por la falta de convenio y justificación del coste).
La Federación exigía al Ayuntamiento que obligara a pagar a los taxistas (de la asociación minoritaria de Vila) su deuda (20.000 euros en total, según Cardell) y estos últimos que supervisara y exigiera la justificación del coste que les reclaman. El gestor del GPS cortó el servicio a los 12 taxistas sin la autorización previa del Consistorio, en contra de lo que determina el reglamento municipal. «No digo que hayamos hecho las cosas completamente bien, pero parte de la culpa es del Ayuntamiento por no ordenar ][el servicio] y de los taxistas [los 12 del colectivo minoritario] por no pagar», indica Cardell.
El representante de los taxistas también resta importancia a que no se haya firmado aún el convenio, pese a que ya ha arrancado la temporada. «No es un problema de vida o muerte. No deja de ser un mero trámite administrativo, que se debe cumplir, pero hay un GPS. No hay ningún problema», dice.
