La dirección general de Recursos Hídricos, dependiente de la conselleria balear de Medio Ambiente, ha requerido al Ayuntamiento de Sant Josep a que, en un plazo de dos semanas, acredite la documentación en base a la cual se autorizaron las obras de ampliación de la depuradora de Cala Vedella y la construcción de un edificio de viviendas, situado justo enfrente, en la desembocadura del torrente, la promoción Vadella 24. La conselleria de Medio Ambiente advierte al Consistorio de que las obras se emplazan en una zona de dominio público hidráulico y que, en su base de datos, no sólo no figura ningún permiso por parte de Recursos Hídricos para la concesión de la licencia, sino tampoco una solicitud de autorización.

La diligencia que ha cursado Recursos Hídricos al Ayuntamiento, la segunda en el último mes (la primera fue por las obras de la depuradora) obedece a la denuncia de un arquitecto que ha desarrollado diversos proyectos en esta urbanización y que ya ha denunciado otras supuestas irregularidades urbanísticas en Cala Vedella que se investigan en los juzgados, como la promoción Vadella 64 o la reforma ilegal del antiguo restaurante Es Petit para reconvertirlo en nueve en apartamentos turísticos.

El denunciante alertó a Recursos Hídricos de que los muros que se están construyendo en esta promoción de viviendas taponan la salida natural del torrente, con el consiguiente riesgo en el caso de que se produzca un episodio extraordinario de lluvias torrenciales. Frente a este solar en construcción, que anteriormente se utilizaba como aparcamiento, hay una calle y una manzana de viviendas antiguas (en forma de U), conocida como Los Pitufos, que interrumpen también el paso del agua hacia la playa, aunque hay dos calles laterales que conectan con el arenal.

El pasado día 5, el Ayuntamiento de Sant Josep ordenó la paralización de las obras de ampliación de la depuradora, que ejecuta UMSA, la entidad urbanizadora de Cala Vedella, después de que, precisamente, la dirección general de Recursos Hídricos le comunicara que para ejecutar dichas obras era preceptivo un informe favorable de la autoridad hidráulica de las islas. Además, el concejal de Urbanismo, Ángel Guerrero, aseguró que los técnicos municipales verificaron que se había producido un exceso de excavación sobre el proyecto inicialmente previsto y autorizado (con una declaración responsable) por parte del Ayuntamiento.

El informe de la promotora

Sin embargo, el ingeniero civil Germán Cifuentes ha elaborado un informe técnico, a instancias de la promotora, en el que especifica que el curso de agua no está catalogado como torrente (el de Cala Vedella se halla más al norte), sino como canal y que, además, al tener una cuenca inferior a 0,2 kilómetros cuadrados, «no es necesario», según el Plan Hidrológico de Balears, solicitar ningún permiso complementario al municipal.

Del mismo modo, este técnico explica que en el caso de Vadella 24, la promotora «ha ampliado y mejorado un by pass antiguo existente» para evacuar el agua de escorrentía a través de un canal de desagüe a la playa. «No se interrumpe el paso natural del agua de escorrentía, que es bastante limitada en volumen porque no hay una cuenca suficiente», destaca.

El edificio Vadella 24, que promueve Vadella Mediterranean Homes SL justo delante de la depuradora, consiste en la segunda fase de un proyecto (para construir 20 apartamentos, 28 estudios, locales, piscina y un aparcamiento público en dos edificios) que obtuvo licencia de obra por parte del Ayuntamiento en 2001. El permiso de obra se concedió a Atika del Noroeste SL, que ejecutó la primera fase (25 estudios y cinco locales, junto a la playa). Esta sociedad no ha cedido el derecho de la licencia a la nueva propiedad, Vadella Mediterranean (para la segunda fase), lo que ha generado otro conflicto que ha sido denunciado en el Ayuntamiento y en el Registro de la Propiedad.