El Consejo de Ministros aprobará mañana «una inversión de 21,1 millones de euros para la contratación de las obras de rehabilitación del Castillo y de la almudaina de Dalt Vila como futuro Parador de Turismo de Ibiza», según anunció ayer la ministra de Turismo, Industria y Comercio, Reyes Maroto, durante el desayuno informativo celebrado en el Club Diario de Ibiza.

Maroto explicó que «tras ocho años de obras paralizadas», el Gobierno al fin aportará el presupuesto necesario para completar ese proyecto. La ministra especificó a esta redacción que la licitación será publicada en el BOE la próxima semana y que será adjudicada en septiembre, sea cual sea el resultado electoral, subrayó. Es, señaló, «un trámite ordinario» que seguirá su proceso sea quien sea el ganador de los comicios del próximo domingo.

La rehabilitación está presupuestada en 21,1 millones de euros y tendrá una duración máxima de tres años, según detalló Maroto tras la charla que ofreció en el Club Diario bajo el título 'Retos para el turismo en España'. Esa cantidad, sin embargo, contrasta con los 25,6 millones que el director general de Turespaña, Héctor Gómez, aseguró hace mes y medio que se invertirían en el Parador.

Reyes Maroto consideró que el Parador, una vez entre en funcionamiento, «contribuirá a mejorar la rentabilidad social y económica del turismo, al tiempo que abrirá nuevas perspectivas hacia una actividad turística más diversificada, sostenible a largo plazo y con una mayor rentabilidad».

La ministra estimó que «la ubicación del Parador será un importante dinamizador del tejido empresarial de Ibiza por su condición de elemento patrimonial con carácter histórico, testigo de la historia del Mediterráneo, como demuestran los restos arqueológicos que quedarán preservados y generarán un nuevo modelo de turismo cultural».

En ese sentido, aseguró que «contribuirá a la creación de una imagen de la isla de Ibiza como nuevo destino cultural en el Mediterráneo». También ayudará a ese desarrollo el hecho de pertenecer a una red que ya cuenta con 93 paradores y que es «única en el mundo».

Reyes Maroto: "Tenemos que tomar medidas para evitar los efectos negativos del brexit"

Reyes Maroto: "Tenemos que tomar medidas para evitar los efectos negativos del brexit"

La ministra, hablando sobre el brexit.

En palabras de Maroto, «el Parador es la gran historia de nunca acabar», desde que el Ejército lo cedió a la isla en los años 70: «Asumí el compromiso con el alcalde de Ibiza, Rafa Ruiz, la primera vez que le vi, nada más llegar yo al ministerio». «Simplemente -añadió- se necesitaba voluntad política para terminarlo. Era una simple cuestión de presupuesto».

También comentó que «la previsión es que, en muy poco tiempo, esté acabado». Como máximo, las obras durarán «tres años», según figura en los pliegos de su licitación. En ese sentido, recordó que «ya hay un 60% de la obra realizada», un 63,8% según calculó Héctor Gómez.

10 millones para "zonas pioneras"

10 millones para "zonas pioneras"

Durante la conferencia que ofreció la ministra de Turismo, Reyes Maroto, en el Club Diario de Ibiza, mencionó que, en caso de que el PSOE retome las riendas del Gobierno tras las elecciones legislativas de este domingo, recuperará una partida de 10 millones de euros para «zonas turísticas maduras» de Balears, que forman parte de los 22 millones que se destinarían para toda España. José Antonio Roselló, vicepresidente de la Confederación de Asociaciones Empresariales de Balears (CAEB), fue a su encuentro en cuando acabó la charla para recordarle que, en ese caso, difícilmente podría ser aplicado en Ibiza, de manera que todo ese dinero acabaría en Mallorca, que sí tiene zonas maduras declaradas. De hecho, ese tipo de declaración ha sido rechazado en Sant Antoni porque podría suponer un drama para algunos negocios y un trámite muy farragoso para el Consistorio.

La ministra matizó a Roselló que, en realidad, en vez de «zonas maduras» se refería a «zonas pioneras», lo cual clarificaría el proceso. Las zonas pioneras son las que, por el tiempo transcurrido desde que se dedican a la actividad turística, «necesitan una reforma urbana, adaptarse a los tiempos», según Roselló. El cambio de léxico es, en este caso, vital, pues se evita tener que declarar la zona madura, un engorro burocrático, y es el propio Gobierno central el que determina cuál es pionera, así cómo adónde destina la inversión. A juicio de Roselló, Sant Antoni y Platja d'en Bossa son destinos pioneros.