El italiano G. B., de 30 años de edad, que fue arrestado por los carabinieri a petición de la Guardia Civil y la Policía Nacional de Ibiza , que emitió una Orden Europea de Detención y Entrega, reconoció ayer ante el Juzgado de lo Penal número 1 de Ibiza ser uno de los autores de dos atracos en la ciudad de Ibiza y en Sant Antoni en 2016 y se conformó con una pena de cuatro años de prisión. El acusado admitió haber participado en el atraco perpetrado el 14 de julio de 2016 en la sucursal del BBVA de la avenida de Isidor Macabich de Vila, de donde se llevaron 35.400 euros, y del ocurrido el 9 de julio de ese mismo año en la Banca March de Sant Antoni, donde el botín fueron 30.000 euros, 4.800 libras esterlinas y 450 dólares estadounidenses.

Cuatro años de cárcel también es la pena que se le impuso a otro hombre de nacionalidad italiana por haber participado en estos dos atracos, si bien este acusado, en el juicio, que celebró en abril la titular del Juzgado de lo Penal número 2 de Ibiza, Martina Rodríguez, sólo reconoció ser el autor de uno de ellos, en concreto el del BBVA de la avenida de Isidor Macabich de Vila.

Los investigadores sospechan que estas dos personas formaban parte de un grupo organizado originario de la provincia siciliana de Catania al que se acusa de haber perpetrado cuatro atracos en bancos en la isla durante la temporada turística del año 2016, tres en la sucursal del BBVA de la avenida de Isidor Macabich de Vila y otro en la oficina de la Banca March de Sant Antoni. Todos ellos en bici.

Según las investigaciones policiales y judiciales llevadas a cabo en la isla, el grupo lo formaban al menos cinco personas que iban cambiando sus funciones dentro de la estructura según las necesidades del caso.

En Barcelona

Además del arrestado en Italia, que fue juzgado ayer en la isla, otros dos presuntos componentes de este grupo fueron detenidos en plena acción por los fura, que son los agentes de incógnito de los Mossos d'Esquadra. Los fura les arrestaron cuando estaban atracando una oficina del Banco Sabadell de Ciutat Vella, en Barcelona.

Dos días antes, también en la capital catalana, habían atracado al menos una oficina más, en concreto una sucursal de la Caixa situada en el número 13 de la avenida Marquès de l'Argentera, según informó el diario La Vanguardia.

En estos seis asaltos a bancos, los cuatro de Ibiza y los dos de Barcelona, los ladrones emplearon bicicletas para llegar hasta los bancos. Una vez obtenido el botín también huían a pedales.

De hecho, según La Vanguardia, los fura siguieron sigilosamente a los dos sospechosos en bicicleta. De esta forma, lograron no despertar las sospechas de los atracadores, que también iban en bici.

En todos los atracos, mientras uno de los ladrones entraba en la oficina y amenazaba a los empleados, el otro vigilaba la puerta. No se registraron heridos. En total, el dinero en los seis atracos ronda los 8o.000 euros.