El alcalde de Sant Antoni, José Tur, y la concejala de Gobernación, Aída Alcaraz, han visitado hoy los trabajos de remodelación del edificio que albergará el retén de la Policía Loca Las obras, adjudicadas por un importe de 1,4 millones de euros, transformarán el antiguo centro de salud de la calle Alicante para que pase a tener usos policiales.
El plazo de ejecución de los trabajos es de cuatro meses, por lo que está previsto que la adecuación haya concluido a finales de abril o principios de mayo. El retén policial de Sant Antoni está ubicado actualmente en el antiguo matadero, un inmueble que ha desempeñado a lo largo de su historia diferentes funciones. El nuevo edificio se está remodelando para ajustarse específicamente a las tareas policiales, de manera que las dependencias ganen funcionalidad y permitan a los agentes operar con mayor eficacia.
En la nueva ubicación habrá espacio para oficinas, almacén, archivo y armeros con condiciones de seguridad adecuadas, entre otros espacios. Con el traslado del retén desde la avenida de Portmany al núcleo urbano se da cumplimiento a uno de los deseos manifestados por diferentes colectivos durante la redacción del Plan Estratégico, en el que se solicita una mayor proximidad de este cuerpo de seguridad.
