El precio medio del metro cuadrado de una vivienda en la isla de Ibiza cuesta ya casi el triple que en el conjunto de España, según los datos del último trimestre del año pasado. El informe elaborado por la empresa urbanData Analytics (uDA) revela que la media, en los cinco municipios de la isla, del coste de la vivienda se sitúa en 4.616 euros por metro cuadrado, cuando la nacional es de 1.679 euros. Además, el precio del metro cuadrado en Ibiza se acerca al doble (72% más) de la media balear (2.683 euros), según los datos del mismo estudio, lo que evidencia que el problema de la vivienda en la isla es mucho más grave que en el resto del archipiélago balear.

El precio medio de las viviendas adquiridas en Calvià durante el último trimestre del pasado año se sitúa en 3.462 euros por metro cuadrado, lo que lo convierte en el municipio con los valores más elevados de Mallorca, seguido de Andratx y sus 3.351 euros. En cualquier caso, los problemas existentes en Mallorca para adquirir una residencia no son comparables a lo que sucede en la isla de Ibiza. Porque en su capital oficiosa, Vila, el precio medio se sitúa en 5.218 euros por metro cuadrado, lo que lo coloca en el punto más alto del archipiélago, dato que prácticamente duplica la media balear.

En Sant Joan llega a los 5.058 euros, en Santa Eulària alcanza los 4.515, en Sant Josep se sitúa en los 4.399, y en Sant Antoni se fija en 3.892. Eso supone que no hay ni una población ibicenca en la que el precio sea inferior a Calvià, el más alto en Mallorca, y explica el gravísimo problema residencial que se ha generado en la isla pitiusa. En el caso de Palma, este precio medio se cifra en los 2.596 euros por metro cuadrado.

Escalada a lo largo de 2018

El informe de uDA también pone de manifiesto el aumento del precio de la vivienda registrado en los últimos meses de 2018 en comparación con el primer trimestre. Apunta, en este sentido, por ejemplo que en Palma creció una media del 7,7% y en Calvià un 6,1%. En cualquier caso, ninguno de estos porcentajes tiene parangón con lo sucedido en el municipio de Ibiza durante 2018, donde ese encarecimiento se elevó hasta colocarse en un 16,7%.

Esta empresa de análisis de datos inmobiliarios apunta, en cualquier caso, la gran diferencia existente dentro de las propias islas según el municipio, por lo que al esfuerzo económico que una familia debe de hacer para adquirir un inmueble. Para hacerse con una residencia en Calvià es necesario destinar 13,6 años de la renta bruta de un hogar, según uDA, plazo que baja hasta los 8,9 años en el caso de Palma; 6,1 años en Manacor; y 4,7 en Inca.La media de Balears es de 10,9 años de renta bruta, pero hay que tener en cuenta que ésta se ve afectada por la situación de las Pitiusas, dado que en el municipio de Ibiza ese esfuerzo se incrementa hasta los 15 años.

El precio que la vivienda está alcanzando en algunos municipios de Mallorca explica que este producto resulte menos atractivo como inversión, al ser cada vez más complicado obtener una rentabilidad importante si se destina al mercado del alquiler.

Concretamente, el informe de uDA pone de relieve que es precisamente Inca una de las poblaciones en la que está rentabilidad es más alta, al cifrarse en un 6,1% el porcentaje anual de rentas que se pueden obtener en relación al precio de compraventa. En el caso de Ibiza, esa rentabilidad desciende hasta el 3,9% debido al fuerte desembolso que es necesario hacer para adquirir un inmueble.

Los precios de la vivienda en compraventa y de los alquileres de Balears crecerán durante este año en torno a un 10%, lo que en el segundo caso supone mantener una tendencia similar a la nacional, pero en el primero coloca de nuevo a las islas muy por encima de la media del conjunto del país, dado que se estima que ese aumento en el precio de los inmuebles se limitará a un 3,7% en España, según las estimaciones de uDA. El concreto, esta empresa sitúa al archipiélago como la provincia en la que más se va a revalorizar el precio de los inmuebles residenciales, con un alza del 10,1%.

«Los clientes están hartos»

Esta previsión, sin embargo, no es compartida por los representantes del sector inmobiliario en las islas, por un argumento bien simple, y es que «los clientes ya están hartos» de los precios del archipiélago, según señala el presidente de la asociación de promotores, Luis Martín, lo que está generando un retroceso en la demanda. El presidente del colegio de agentes de la propiedad inmobiliaria, José María Mir, también considera que el valor de los alquileres está alcanzando un punto del que resulta difícil pasar.

Por ello, Martín prevé que el precio de la vivienda en compraventa crezca, en el mejor de los casos, en torno a un 5%, mientras que Mir vaticina que los alquileres se estancarán o presentarán incrementos moderados que se pueden situar en torno a un 2%.