Nada parece tener una explicación razonable en la extraña desaparición del 'Dreamland'. El velero, con tres tripulantes a bordo, podría encontrarse en Argelia o Túnez de haber sufrido un accidente. Así lo apuntan los estudios de la posible deriva del barco después de haber zarpado de Palma el pasado 5 de enero. Sin embargo un cúmulo de incógnitas envuelven su misteriosa desaparición. Hasta el punto de que cada vez se cuestiona más la hipótesis de un posible accidente náutico

La patrullera 'Cabaleiro' del Servicio Marítimo de la Guardia Civil se adentró estos días en el canal de Mallorca, siguiendo el rumbo más probable de la embarcación. No encontraron rastro de ella, pero los estudios de deriva, de vientos y corrientes señalan inequívocamente hacia el norte de África, en concreto a Argelia o a Túnez, como su destino más probable.

Salvamento Marítimo ha hecho un llamamiento a clubes náuticos y puertos españoles para que le comuniquen si el velero 'Dreamland' atraca en un muelle. Hasta el momento la respuesta ha sido negativa.

A bordo del 'Dreamland' iban Álvaro Aguirre Presa, de 67 años, Fernando Mogica, de 48, y Antonio Pérez Carrasco, de 66 años. Su intención inicial era dirigirse a Italia, pero el despacho del barco no les permitía salir de Balears. Su destino final era Ibiza y Formentera. Así lo comunicaron a la empresa propietaria del velero antes de zarpar.

Al timón iba Álvaro Aguirre Presa, un experimentado patrón de cabotaje asturiano. ¿Por qué no activó la radiobaliza, para señalar su posición, si tuvo algún problema durante la singladura? Esta pregunta tampoco tiene respuesta por el momento.

Al no cumplir con el plazo de entrega, el propietario del velero 'Dreamland', valorado en 80.000 euros, denunció ante la Policía Nacional su supuesta sustracción. De acuerdo con el escrito, el dueño le acusa de «quedarse la embarcación para su propio beneficio». La acusación se sustenta en un supuesto testimonio que señala a Aguirre como un experto en «transporte de embarcaciones».

«Es una apropiación indebida como un templo», abundó ayer José María Jiménez, dueño de la empresa Latitud Cero, propietaria del barco. Además, Jiménez es el presidente de la Comisión del área de Chárter náuticos de la Asociación Patronal de Empresarios de Actividades Marítimas de Balears (Apeam).

Denuncia prematura

Mientras, Álvaro Aguirre Arroyo, hijo del patrón del barco, denunció el pasado 11 de enero ante la Guardia Civil de Ibiza la desaparición del barco con su padre y otros dos tripulantes a bordo. Sus quejas van dirigidas también a lo que considera «un retraso inexplicable» de los servicios de emergencia en buscar a su progenitor y a los otros dos ocupantes del 'Dreamland'.

Sin embargo, en el momento en el que el hijo de Álvaro Aguirre Presa formula la denuncia de la desaparición del velero aún no se ha cumplido el plazo de entrega del barco. La fecha máxima era la tarde del 15 de enero.

A medida que surgen más interrogantes, el dueño del barco sospecha que estaba todo planificado para arrebatárselo. «Si residen en Alicante y quieren ir a Ibiza es más lógico que lo hagan desde allí y más barato», asevera.