La Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM) de la Policía Nacional detuvo en 2018 a un total de 245 personas, de las que un 80 por ciento fueron hombres denunciados por violencia de género. Además, a diferencia de 2017, el año pasado en la comisaría no atendieron ningún caso de malos tratos a menores.

La subinspectora del Área de Investigación de la UFAM de Ibiza, Jimena López, recalca que 2018 fue un año «de mucho trabajo», que se justifica, en parte, por el aumento del 2% de los arrestos por malos tratos con respecto al año pasado, cuando se detuvieron a un total de 190 hombres por maltratar a sus parejas o exparejas.

Antes de ofrecer más datos, la subinspectora de UFAM quiere «dejar claro» que su unidad atiende casos de violencia machista y de violencia doméstica, donde se engloban las agresiones entre, por ejemplo, hermanos, familiares o de mujeres a hombres. «También atendemos a aquellos que denuncian malos tratos de sus parejas o exparejas e incluso hemos detenido a mujeres, pero en Balears no ha fallecido ningún hombre a manos de su mujer o exmujer», señala López. «La violencia de género existe y negarla me parece un error», reitera esta subinspectora de la Policía Nacional.

Aunque la violencia machista es un delito público, son las propias víctimas las que denuncian las agresiones. Por ello, López insiste en que «cualquier persona» puede denunciar una agresión machista. Entre los casos «más duros» que atendió la UFAM el año pasado, esta subinspectora recuerda el de una mujer de avanzada edad, que llevaba toda la vida casada con el mismo hombre, que desde el inicio de su matrimonio sufría maltrato físico, psicológico y sexual. Se atrevió a denunciarlo y poner fin a esta espiral de violencia porque sus familiares la convencieron y la acompañaron a la comisaría a denunciar a su marido. Sin embargo, el problema ocurre cuando tras dar este paso en comisaría se «retractan» en los juzgados. «Tras la denuncia, se sienten culpables de lo ocurrido, reciben presiones externas, a veces incluso de su propia familia, no solo de la del agresor, y/o ellos les prometen que no lo volverán a hacer», remarca la policía nacional.

Como ha reiterado en diversas ocasiones, López subraya que en sus 18 años como policía nacional, ningún hombre denunciado por violencia de género ha reconocido «haberse portado mal con su mujer» e insiste en que hay maltratadas que «nunca han recibido una bofetada». Son víctimas a las que sus parejas no las han agredido físicamente, pero psicológicamente están «hundidas». «Viven con miedo a que ellos se enfaden por cualquier cosa. Piensan que todo lo hacen mal porque ellos las machacan», explica la subinspectora de la UFAM.

Por ello, reitera que el maltrato psicológico también es «violencia machista», pero a este tipo de víctimas les cuesta más denunciar. «Ya sé que tenéis casos más graves» es la frase con la que empiezan su relato este tipo de víctimas, aunque muchas otras no se atreven a contarlo.