Las Pitiusas albergan un valioso patrimonio natural ligado al agua. Fuentes, torrentes y ríos, zonas húmedas litorales y balsas temporales son ecosistemas acuáticos únicos por sus singulares valores ecológicos y paisajísticos. Constituyen islas de biodiversidad dentro de nuestras islas. Dependen del agua subterránea, principal recurso hídrico natural de nuestras islas. Sin embargo, la fuerte presión sobre los acuíferos y su consecuente agotamiento ha provocado que muchos de estos ecosistemas hayan desaparecido.
Por ello, conocer esta herencia natural es fundamental para su recuperación y que nuestras generaciones futuras puedan disfrutarlas. El río Santa Eularia o ses Feixes des Prat de Vila y ses Monges son ejemplos de ecosistemas acuáticos degradados con un elevado potencial ecológico y de uso público.
La recuperación de estos ecosistemas acuáticos dependerá de la capacidad de reducir la presión sobre los acuíferos y la iniciativa de las entidades públicas locales y autonómicas para liderar su mejora y conservación. La normativa de aguas y de biodiversidad así lo requiere.
Las Pitiusas albergan una diversidad de ecosistemas acuáticos
Las Pitiusas albergan una diversidad de ecosistemas acuáticos
El clima mediterráneo subdesértico, la orografía abrupta y la corta extensión superficial hacen que en Ibiza se desarrolle una red hidrográfica muy densa de torrentes que la mayor parte del año discurren secos, con excepción del río Santa Eularia que era el único curso fluvial permanente de las Balears. La fuerte presión sobre los acuíferos ha provocado el descenso del nivel freático del río y la pérdida de su régimen hídrico permanente. En cambio los torrentes son ríos temporales con unas comunidades acuáticas biológicas únicas por su capacidad de adaptación a la alternancia de periodos secos y torrenciales.
Entre los torrentes de mayor entidad destacan los torrentes de sa Llavanera, Buscastell, Sant Miquel y es Jondal. Éste último torrente ha sido protegido como reserva fluvial por el Govern balear por sus valores naturales. Todos ellos tienen una gran belleza paisajística por la integración del paisaje natural y agrícola tradicional, destacando especialmente el torrente de Buscastell.
Las balsas o charcas temporales y las zonas húmedas son también ecosistemas acuáticos muy valiosos. En este sentido, las balsas temporales están catalogadas por su singularidad y fragilidad como hábitats naturales de interés prioritario por la Unión Europea, el mismo nivel de protección que las praderas de Posidonia. En Balears, esta catalogación ha conllevado la creación de un espacio natural protegido Red Natura 2000 que incluye 2 balsas temporales o cucons de Formentera: la bassa de Sant Francesc y la bassa de Formentera.
Las zonas húmedas litorales de las Pitiusas incluyen ses Salines de Ibiza y Formentera y las lagunas litorales de s'Estany Pudent y s'Estany des Peix, todas ellas incluidas en el Parque Natural de ses Salines de Ibiza y Formentera. Ses Feixes des Prat de Vila y ses Monges son otra zona húmeda litoral que a pesar de estar muy degradada tiene todavía un gran potencial ecológico.
Por último, existe pequeñas zonas húmedas en la desembocadura de torrentes de Ibiza, hoy en día prácticamente desaparecidas. Mención aparte tiene los ecosistemas costeros marinos muy influenciados por la actividad humana terrestre y que alberga las praderas de Posidonia de gran importancia ecológica.
Los ecosistemas acuáticos son el hábitat de especies singulares y frágiles
Los ecosistemas acuáticos son el hábitat de especies singulares y frágiles
Los ecosistemas acuáticos albergan numerosas especies animales que dependen de este hábitat para su alimentación, reproducción o resguardo. La avifauna acuática es el grupo animal más destacado. Flamencos, cigüeñuelas, chorlitejos, avocetas, ánades y tantas otras aves nidifican en el Parque Natural de ses Salines a pesar de la fuerte presión humana que recibe. Ses Feixes del Prat de ses Monges también recibe especies de gran valor como el rascón europeo constatando el gran potencial ecológico de este espacio. Otro habitante destacado de torrentes y balsas es el sapo verde balear o calapet. Este anfibio es endémico de las Baleares y está en peligro de extinción. Su presencia se ha reducido por la desecación permanente de estos ecosistemas acuáticos así como la desaparición de otros puntos de agua naturales o artificiales (safareigs, canales de agua, etc.).
En relación a la ictiofauna se debe destacar la presencia de anguila europea en los canales de ses Feixes des Prat de ses Monges a pesar del fuerte declive de su población en todo el territorio español. Esta especie migratoria está sujeta a un plan de gestión de Balears para su recuperación.
La vegetación acuática también es de gran relevancia por su diversidad. La variación de salinidad y del régimen hídrico genera una diversidad de ambientes para la vegetación. Salicorniales, juncales, carrizales se desarrollan en las zonas húmedas litorales en función principalmente de su salinidad. Las adelfas también son una comunidad arbustiva que se desarrolla en torrentes de Ibiza a diferencia del resto de islas del archipiélago balear. Se acompaña del sauzgatillo (aloç), el mirto o el carrizo. Sin embargo la invasión de la caña común en muchos cauces, ligada al abandono del campo, ha provocado la reducción de la vegetación original de cursos fluviales original.
Las medidas para la recuperación ambiental de los ecosistemas acuáticos
Las medidas para la recuperación ambiental de los ecosistemas acuáticos
La recuperación de estos espacios se inicia con obtener una mayor grado de conocimiento para tomar medidas. Un ejemplo es la necesidad de fortalecer el seguimiento de aves acuáticas en las principales zonas húmedas litorales de las Pitiusas, tal y como ya se desarrolla anualmente en el Parque Natural de ses Salines. También se debe destacar el trabajo que ha realizado la organización conservacionista WWF en el inventario de humedales de las Balears como paso previo a su conservación.Otro ejemplo es el estudio para la recuperación hidrológica
y ambiental de ses Feixes promovido por el Consell de Ibiza que sienta las bases para definir las actuaciones necesarias. A partir de establecer el diagnóstico y las propuestas de actuación las administraciones públicas competentes deben apostar por dotar de los medios económicos y humanos para su recuperación. Los ecosistemas acuáticos suponen un capital ecológico a recuperar y tiene también son una oportunidad para diversificar la actividad turística apostando por el ecoturismo.
