Las autopsias han revelado que la mujer hallada muerta el lunes en su chalé de Llucmajor pudo fallecer hasta cuatro días antes que su novio, que apareció ahorcado en la vivienda. Los médicos forenses estiman que Stefanie de Riz, de 59 años, llevaba entre cuatro y siete días fallecida, mientras que Udo von Salzen, de 55, se habría suicidado entre tres y cinco días antes del hallazgo. Sigue siendo un misterio cómo murió la mujer, ya que la necropsia no permitió aclararlo. Los especialistas han remitido al Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses varias muestras para comprobar si de Riz tenía lesiones que no han pido ser detectadas o había ingerido drogas, fármacos o sustancias venenosas. La Guardia Civil, a la espera de estos resultados, sigue trabajando con varias hipótesis.

Las dataciones de las muertes sitúan el fallecimiento de la mujer entre el 8 y el 11 de enero y la del hombre entre el 10 y el 12. Los dos cadáveres estaban ya en estado de descomposición. Ella estaba tumbada en una cama del dormitorio, en posición fúnebre y con una flor en las manos, mientras él apareció ahorcado en uno de los pasillos del chalé, en la calle Xiprer de la urbanización Las Palmeras. En el caso del von Salzen no hay dudas de que se suicidó, pero la causa de la muerte de Stefanie de Riz sigue siendo desconocida. Su cadáver no presentaba signos evidentes de violencia ni heridas defensivas. Los forenses no han podido certificar todavía cómo falleció y así lo han hecho constar en su informe preliminar. El cuerpo fue sometido a un TAC en Son Espases, pero tampoco esta prueba permitió resolver las dudas.

Los especialistas del Instituto de Medicina Legal de Palma tomaron varias muestras del cadáver de la mujer para remitir el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses, en cuyos laboratorios se llevarán a cabo pruebas más minuciosas. Los análisis podrían revelar lesiones microscópicas que ayuden a determinar si falleció de manera violenta. También se estudiará si la mujer estaba bajo los efectos de drogas, fármacos o tóxicos cuando falleció.

Los investigadores de la Guardia Civil, con estas incertidumbres, siguen manejando varias hipótesis. Algunos testigos han explicado que la pareja estaba en crisis, las discusiones eran frecuentes y ella quería dejarle.