La economía de Ibiza y Formentera es la que más creció de Baleares, con un 3,1 por ciento, en el tercer trimestre del año, pero ha moderado su ritmo por la «menor contribución de los servicios turísticos» y, en concreto, por el descenso de la llegada de turistas, según informó ayer la Confederación de Asociaciones Empresariales de Balears (CAEB) en la presentación en Palma de su informe coyuntural 'Evolución Económica'. A pesar de esta ralentización, el crecimiento de las Pitiüses se sitúa cinco décimas por encima del de Balears, que fue de julio a septiembre del 2,6%.

La CAEB también destaca en su informe que aunque la economía pitiusa vuelve a liderar el crecimiento de la economía balear, durante el tercer trimestre ha perdido ritmo de crecimiento de manera más intensa que la media de Balears (que ha pasado de un crecimiento del 2,9% al 2,6%), lo que ha estrechado el diferencial que le separa de la media balear. Esta «ralentización» se debe, según la patronal, a que la economía pitiusa se ha visto afectada en mayor medida que el resto de islas por la normalización de los flujos de afluencia de visitantes como consecuencia de su grado de especialización turística más elevado.

A continuación, añade que la llegada de turistas ha bajado en términos interanuales en Ibiza y Formentera (-3,9%), «mientras ha mantenido un pulso más sostenido en el resto de islas (-0,2%)».

La razón de ello es «el descenso más acentuado» que experimentó la afluencia de turistas procedentes del Reino Unido (7,2% menos, mientras que en Baleares la bajada fue del 1,8%), Alemania (un descenso del 15,2% por 4,1% de media en las islas) o de los países nórdicos (36,2% menos frente a un descenso del 4,1% de las islas), «al mismo tiempo que el mercado nacional, el segundo de mayor importancia en el territorio pitiuso después del británico, no ha hecho gala del mismo empuje que en el resto del conjunto regional», ya que en las Pitiusas ha bajado un 2%, mientras que en Balears este mercado aumentó un 5,5%.

«Empuje» de la construcción

En la misma línea, el crecimiento de la afiliación de trabajadores en Ibiza y Formentera se ha ralentizado en las ramas de la actividad turística en mayor medida que en el conjunto del archipiélago y que en el resto de ramas del sector servicios. Sin embargo, esta situación contrasta con el espaldarazo del empleo en el resto de sectores del tejido productivo pitiuso, ya que la afiliación de trabajadores ha intensificado el ritmo de crecimiento tanto en la industria (pasando del 0,9% del segundo trimestre al 3,5% del tercero) como, sobre todo, en la construcción, que ha duplicado su crecimiento al pasar del 3,1 al 6,7%.

No obstante, esta circunstancia no se ha trasladado a la evolución del empleo agregado «dado el menor peso relativo de ambos sectores en la estructura productiva de las Pitiusas». Respecto a la demanda, el «menor empuje» de la economía pitiusa se debe al consumo privado por el descenso en la matriculación de vehículos registrado en los meses de julio (-3,4%) y septiembre (-12,3%), después de la tendencia ascendente del segundo trimestre (12%), así como del aumento más moderado de las mercancías transportadas en los puertos de Ibiza y la Savina .