La Policía Local de Ibiza tuvo que encargarse de realizar los atestados de tres accidentes de tráfico que se produjeron durante el pasado fin de semana, en los que los conductores de los vehículos implicados dieron positivo en la prueba de detección del consumo de alcohol. Además, en los controles de alcohol y drogas realizados por el servicio nocturno de la Policía Local de Ibiza de viernes a domingo fueron denunciados otros cinco conductores con alcoholemia positiva y otros cinco más para dar positivo en drogas. En total, trece conductores borrachos o drogados.
Dos de los accidentes registrados este fin de semana se produjeron en el mismo punto, ambos en la madrugada de sábado, en la avenida de la Paz a la altura de la rotonda de ses Figueretes.
El primero ocurrió cerca de las dos de la madrugada, cuando un Seat Córdoba se salió de la calzada por la izquierda y se subió sobre la isleta, donde arrancó un panel direccional antes de topar frontalmente contra una de las palmeras. Según todos los indicios, el accidente se debió a la gran velocidad a la que circulaba el vehículo. Los agentes apreciaron que el conductor presentaba síntomas de estar bajo la influencia del alcohol, por lo que le realizaron la prueba de alcoholemia, en la que dio 0,70 miligramos de alcohol por litro de aire espirado. Fue imputado por un delito contra la seguridad en el tráfico. El hombre, de 30 años, fue trasladado a Can Misses porque se quejaba de dolores a la zona cervical y el pecho, informó el Ayuntamiento.
En el mismo lugar
El segundo de los accidentes que se produjo en la rotonda de ses Figueretes se produjo sobre las cinco madrugada del sábado. Después de arrancar otro de los paneles direccionales e impactar contra la palmera que se encuentra situada en el centro de la isleta, el coche accidentado acabó en la calzada del sentido contrario debido a la violencia del impacto.
El conductor, que se encontraba inconsciente al llegar los agentes, sufrió lesiones de carácter grave, ya que sufrió un fuerte golpe en el pecho. Fue trasladado a Can Misses. Los agentes que intervinieron se dieron cuenta de que el conductor, de 42 años de edad, desprendía un fuerte olor a alcohol, por lo que solicitaron un mandato judicial para analizar su sangre y abrieron diligencias por un supuesto delito contra la seguridad vial.
La Policía Local también intervino en otro accidente que se produjo sobre las tres de la madrugada del viernes en el Passeig de Joan Carles I. La conductora de un todoterreno estacionado en batería en esta avenida salió marcha atrás con tanta velocidad que el Jeep Wrangler cruzó la calzada y se subió a la acera del margen izquierdo, de forma que chocó contra el muro que delimita el parking de uno de los edificios de la zona. Los agentes también vieron que la conductora, de 33 años, presentaba claros síntomas de estar bajo la influencia del alcohol, por lo que la sometieron a la prueba, en la que dio 0,73. También fue imputada de un delito contra la seguridad en el tráfico.
Cenas de empresa
Además, durante el pasado fin de semana, en el que se han celebrado muchas cenas de empresa por las fiestas de Navidad, la Policía Local ha llevado a cabo varios controles de alcohol y drogas durante el servicio nocturno.
Entre los cinco que dieron positivo en consumo de drogas está el caso de un conductor de 30 años que había consumido al menos cuatro sustancias (cocaína, anfetamina, metanfetamina y cannabis), por lo que podría ser multado con un máximo de mil euros y perder seis puntos del carné.
