El Partido Popular se vendió ayer en su tradicional comida de Navidad en el local polivalente de las piscinas de Sant Joan como la lotería que esperan las islas: «Si conseguimos que gane la lotería del PP, que mantengamos la mayoría absoluta en el Ayuntamiento de Sant Joan, volver a gobernar el Consell de Ibiza y que Biel Company sea presidente del Govern balear nos habrá tocado el premio más Gordo posible», aseguró el alcalde, Antoni Marí, Carraca, ante los alrededor de 400 militantes y simpatizantes congregados.

Entre ellos estaban el propio Company, presidente del PP balear, el presidente insular, José Vicente Marí Bosó, el senador por las Pitiusas Santiago Marí, los diputados en el Congreso, Tania Marí, y en el Parlament balear, Miquel Jerez, el alcalde de la vecina Santa Eulària, Vicent Marí, y el presidente de la Junta Local de Sant Joan, Andreu Roig.

Por su parte, Company demostró que conocía el terreno que pisaba y se comprometió a que «cuando gobierne», el Partido Popular «derogará todas las leyes del Govern balear que durante esta legislatura se han aprobado en contra de los propietarios de tierras agrarias, así como de quien las explota», según una nota remitida por el partido.

Tras los discursos de los cargos públlicos del partido, los asistentes tuvieron la oportunidad de degustar una paella elaborada por varios cocineros en el local policial.