Joan Rita, profesor de Botánica del departamento de Biología de la Universitat de les Illes Balears (UIB), visitó es Vedrà por primera vez a mediados de los años 80, cuando no había cabras. Regresó en 2010: «El cambio fue espectacular. El conjunto de la flora del islote se había modificado sustancialmente desde entonces: en los 80, las plantas eran mucho más grandes, la biodiversidad de flora mucho mayor, había muchos endemismos nada más pisar la isla, en cualquier sitio, sin que para hallarlos tuvieras que escalar por las paredes», contó a este periódico en 2012, cuando los herbívoros ya habían arrasado el islote. Hace seis años ya advirtió de que sobraban todos los rumiantes. Ayer, este botánico, una eminencia, avisaba de nuevo de la necesidad de sacar de allí todos los chivos. Antes de que sea tarde.

Uno de los argumentos que utilizan últimamente muchos animalistas y vedraners para defender que las cabras sigan en el islote es que las 166 especies vegetales que contiene, de ellas 12 endémicas y una exclusiva, la vedranersSantolina vedranensis

No voy a entrar en lo que dicen porque ni les he escuchado. Lo que puedo decir es que es Vedrà es un punto clave del patrimonio natural de Balears, no sólo de las Pitiusas. Es, desde el punto de vista botánico, una joya. Allí hay plantas que son exclusivas de nuestras islas. Incluso hay una que sólo existe en es Vedrà, la santolina. Es una parte del patrimonio que merece ser conservada. Esas plantas que son exclusivas no deberían ser pasto de cabras. Merecen un mejor destino. Es Vedrà es un islote icónico para Ibiza, un monumento paisajístico, pero también es un monumento natural. No debería ser un corral. Hay que tratarlo como el monumento natural que es y estar orgullosos de tener un lugar como ese para Ibiza y Formentera y para todo Balears.

Otro argumento esgrimido por los animalistas y vedraners

Las cabras fueron introducidas en islotes hace mucho tiempo, tanto aquí como en el archipiélago de Cabrera, y seguramente tuvo un efecto devastador sobre ambas islas en aquel momento. Tenemos indicios de que muchas especies exclusivas de Balears ya sólo se encuentran en islotes donde nunca hubo herbívoros. El proceso de extinción y de depauperación que hubo en estas islas hace siglos lo desconocemos, pero todo indica que fue muy importante. Hoy en día la cosa ha cambiado. Ahora sabemos el valor que tienen lugares como es Vedrà. Actualmente es inconcebible que una sociedad como la nuestra, con nuestro nivel de desarrollo y con nuestro nivel cultural, utilice como corral un lugar como es Vedrà. Eso dice muy poco de nosotros.

Durante los años 90, en los que las cabras camparon allí a sus anchas, tanto la Santolina vedranensis

La santolina está, sobre todo, en las grietas de los acantilados porque es donde la dejan estar las cabras. Algunos individuos de esa planta que habían resistido abajo, aunque estaban muy comidos, comenzaron a crecer de nuevo [cuandos se erradicó parte de las cabras], se volvieron a desarrollar y a florecer y a producir semillas, lo que era un muy buen síntoma. Pero ahora, con el incremento de la población de esos rumiantes vuelven a estar comidas. Son plantas que, si pudieran, se extenderían por una superficie mucho mayor y aumentaría mucho su población. Pero no pueden hacerlo por la presencia de las cabras. Algunas de estas especies tienen defensas contra la herbivoría: no son las primeras comidas, son el último recurso de los chivos porque no son palatables para ellas [tienen mal gusto]. Por eso han conseguido resistir todo este tiempo. Comen mucho, y escogen primero las que más les gustan. Muchas veces, esos endemismos son los primeros comidos en unos casos, y en otros, los últimos, en función de lo palatables que sean. Varias especies se encuentran en los acantilados porque no pueden sobrevivir en otro lugar. Es el reservorio que queda de esas plantas.

Otro argumento para no extraer las cabras de es Vedrà: alegan que un determinado número (de cuatro a 14) no daña ese ecosistema.

La capacidad de carga de cabras en es Vedrà es cero. Pongamos que se permiten tres, cuatro? ¿Cómo controlas las extracciones periódicas? Su población crece muy rápido. En su origen, estos islotes nunca tuvieron cabras, hasta que los humanos las introdujeron. Lo que hemos conseguido hoy en día es que ese islote, que es una catedral de nuestro patrimonio, se convierta en un corral.