Por el estrecho pasillo de cuatro kilómetros de longitud y 1.800 metros de ancho de es Freus transitan durante el verano una media de 1.960 embarcaciones al día, según las observaciones realizadas durante los dos últimos años por seis miembros del equipo de gestión del Parque Natural de ses Salines, dependiente de la conselleria balear de Medio Ambiente. El estudio fue dado a conocer por Vicenç Forteza, uno de sus autores, durante las VII Jornadas de Medio Ambiente de Balears, que ayer se inauguraron en la sede ibicenca de la UIB.

Esa es la media entre junio y septiembre, pero hay puntas más elevadas. Por ejemplo, el 19 de agosto pasado se alcanzaron los 2.494 tránsitos (trayectos en una sola dirección) diarios, mientras que el 6 de agosto de 2017 se llegó a los 2.242. Los autores de este informe (Marta Bayona, Marta Castelló, Joan Lluís Colomar, Antoni Estarellas, Núria Valverde y Forteza) subrayan que ese promedio es muy superior al que se produce fuera de la temporada turística o cuando las condiciones meteorológicas son muy adversas.

Esto último fue lo que sucedió el 9 de septiembre de este año, cuando se contabilizaron 330 tránsitos, 2.164 menos que tres semanas antes. El 21 de octubre, ya acabada la vorágine estival, sólo registraron 199 barcos que atravesaran es Freus.

Y de los aproximadamente 2.000 tránsitos diarios en pleno estío, sólo el 8% navegaban a vela, mientras que un 10% eran ferris de transporte regular. El resto, el 82%, eran barcos a motor, de los que el 25% eran de pequeña eslora (de seis a 12 metros), el 50% eran de media eslora (12 a 24 metros) y un 5% de gran eslora (más de 24 metros).

Como la mayoría de las naves tenían «una eslora, una potencia y una velocidad considerable», el consumo de combustible (no son precisamente mecheros) fue parejo. Así, el 19 de agosto pasado, cuando más tránsitos se registraron, se quemaron 345 toneladas de hidrocarburos sólo en esos cuatro kilómetros de franja de es Freus, en el trayecto desde Eivissa a ses Illetes.

Según los cálculos que aparecen en el informe, los barcos que atraviesan en verano esa zona que une Eivissa y Formentera consumen una media diaria de entre 50 y 100 toneladas de hidrocarburos, según la jornada y la época.

Que no es poco, sobre todo si se compara con otras magnitudes que incorporan los autores del estudio. Por ejemplo, el Plan de Movilidad Sostenible de Formentera estima en 7.736 toneladas anuales el consumo de combustible del transporte terrestre de esa isla: «Los datos del consumo de hidrocarburos para el transporte marítimo [en es Freus durante el verano] son sensiblemente superiores», se advierte en el informe. Es decir, las aguas del Parque Natural soportan una fuerte contaminación, susceptible de «provocar el deterioro del medio marino».