La Comisión de Medio Ambiente de Balears ha informado a favor de la evaluación de impacto ambiental de la planta de triaje y el tratamiento de la materia orgánica, mediante el sistema de la biometanización, del vertedero de Ca na Putxa. Las obras de las nuevas instalaciones, imprescindibles para que el vertedero cumpla la normativa europea y estatal actual, que prohíben que se entierre la basura sin una selección y un tratamiento previo, ya han arrancado.

Medio Ambiente ya autorizó hace dos años la planta de triaje y el tratamiento orgánico de los residuos, aunque con el sistema de compostaje. Por ello, se han podido iniciar las obras (movimientos de tierra fundamentalmente, ya que son los mismos tanto para el anterior como para el nuevo proyecto) a la espera de que el órgano ambiental de la Comunitat Autònoma diera luz verde a la evaluación de impacto ambiental del cambio del sistema del compostaje por el de la biometanización, de acuerdo a un dictamen del Consell Consultiu. Se han puesto algunas condiciones, «pero pocas», según el presidente de la Comisión de Medio Ambiente, Antoni Alorda.

Ahora sólo queda pendiente que el sistema de biometanización se incorpore a la licencia ambiental integrada que ostenta la concesionaria (la UTE Giref, formada por Herbusa, FCC, Urbaser y Cespa) para explotar el vertedero. Alorda asegura que será «inmediato» y que podría ser en el pleno de la Comisión de Medio Ambiente de enero. «No hará falta que se paren las obras», indica.

Por otra parte, la Comisión de Medio Ambiente ha rechazado las alegaciones de la UTE Giref en contra de la revisión de la licencia ambiental integrada motivada por el incumplimiento de la obligación de seleccionar y recuperar la mayoría de los residuos que se entierran. Precisamente, por no disponer de la planta de triaje que se construye actualmente, aunque con muchos años de retraso. La concesión, que fue adjudicada en 2003, ya preveía la instalación de la planta de triaje.

En concreto, el órgano ambiental de la Comunitat Autònoma no autoriza el vertido de los residuos en Ca na Putxa sin tratamiento previo, pero, en la práctica, al no haber otra alternativa de gestión de los residuos en la isla, esta prohibición no tiene consecuencias.

De hecho, la Comisión de Medio Ambiente, en el mismo momento que aprobó derogar, de la licencia ambiental integrada, la parte que da cobertura al depósito de la basura en celdas sin un tratamiento previo, acordó que «de ninguna manera se puede interrumpir el servicio», según explica su presidente. «No se puede poner en peligro su continuidad», agrega Alorda.

Situación de emergencia

La Comisión de Medio Ambiente ha denegado la suspensión inmediata del acuerdo, como medida cautelar, pero aún no ha resuelto el recurso. Alorda justifica que la directiva europea y la normativa estatal obligan a que se aplique un tratamiento previo de los residuos en los vertederos y que, para su aplicación, se dio un margen «de diez años» que en el caso del vertedero de Ibiza y de otros en España y Europa no se ha cumplido. «La Unión Europea se encuentra en una situación de emergencia y ya ha advertido de la apertura de expedientes [de sanción] contra los Estados que no adapten los vertederos a la normativa», asegura.

La concesionaria ha alegado contra la decisión del órgano ambiental de la Comunitat Autònoma que tiene una licencia que ampara el actual sistema de gestión de los residuos, sin tratamiento previo, y que para derogar esta parte de la licencia ambiental integrada, la Comisión de Medio Ambiente debería haber procedido a revisarla de oficio, con el correspondiente informe del Consell Consultiu.