El Ayuntamiento de Sant Josep cerrará este mandato con un presupuesto de 35,3 millones de euros, «el más alto de la historia», con una subida del 7% con respecto a este año y un incremento del 45% en sus inversiones debido al inicio previsto de las obras del colegio de ses Planes, en Cala de Bou.

La previsión de ingresos se sitúa en 37,6 millones debido a «la incuestionable capacidad recaudatoria» del municipio, según remarcó el alcalde, Josep Marí Ribas, en la presentación de las cuentas de 2019 junto a la primera teniente de alcalde, Paquita Ribas. Por «la regla de gasto» que marca el Estado, la previsión de gasto del Consistorio no puede alcanzar a la de ingresos, según Ribas. De hecho, el Consistorio tiene un superávit acumulado de la liquidación de las cuentas de los últimos años de 43 millones de euros.

El Consistorio prevé unos ingresos de 14,3 millones en impuestos directos (IBI, impuesto de vehículos y el incremento del valor de los terrenos urbanos), lo que supone un incremento del 12% con respecto a este año sin que se haya previsto subida alguna en los tipos. Marí Ribas explicó, además, que en Sant Josep se aplica el tipo «más bajo» del IBI, por lo que «no se puede disminuir».

Menos ingresos por construcción

Las cuentas prevén unos ingresos de 1,3 millones en concepto de impuestos sobre la construcción, algo menos que este año debido a que no se espera que el año que viene se lleven a cabo muchas más reformas de la planta hotelera. En cambio, se proyecta un incremento de la partida que engloba las tasas y precios públicos, que se situará en 8,6 millones, a causa del aumento de la recogida de reciclaje (el Consistorio lo vende) y las licencias de taxi estacionales.

También se ha planificado un incremento de los ingresos de las concesiones de playa (4,5 millones de euros) pese a la reducción del número de hamacas y sombrillas. Finalmente, la recaudación por estas concesiones no difiere mucho con respecto a la que el Ayuntamiento obtuvo anteriormente con el controvertido sistema de subasta (4,7 millones)

Con una partida de 7,2 millones de euros, el capítulo de inversiones se incrementa un 45% en comparación a este año debido, fundamentalmente, a la incorporación de una partida de poco más de cuatro millones para el nuevo colegio de ses Planes, cuyas obras se estima que empezarán en el primer trimestre de 2019.

Licitación del nuevo colegio

El alcalde avanzó que esta semana se aprobarán las bases de la licitación, con un presupuesto de salida de 4,7 millones. Marí Ribas dijo, además, que las obras de urbanización de la zona ya están «prácticamente acabadas».

El Consistorio adelanta la financiación de esta escuela que la conselleria balear de Educación, a través de la empresa pública Ibisec, devolverá en los próximos 10 años. Precisamente, en el presupuesto de 2019, el Consistorio ha previsto un primer ingreso correspondiente al primer pago de devolución de la deuda por parte del Govern.

Asimismo, se contempla una partida de 172.500 euros para asfaltar y cambiar la señalización de Platja d'en Bossa, una de 150.000 para la construcción de una rotonda en Cala Vedella para evitar el tráfico frente a la playa y otra de 35.000 euros para rehabilitar la torre de Can Curt, en Sant Agustí.

También se proyecta construir una zona recreativa y de ocio (parque infantil) en Puig de n'Alis, en Cala de Bou, con un coste de 382.000 euros, así como la reforma de un local situado junto al campo de fútbol de Sant Josep, con un coste previsto de 130.000 euros, para destinarlo a Casal de Joves.

Una partida de 520.000 euros se destinará a cubrir las pistas deportivas de Sant Agustí y otra de 140.000 euros para la renovación de los vestuarios del campo de fútbol de Sant Jordi.