«Queremos que aprendáis a quereros, a querer al que tenéis al lado. A ser solidarios. A compartir. A preocuparos por el de enfrente». Con estas emotivas palabras hacia los alumnos de Sa Colomina daba comienzo ayer el acto de homenaje de la mano de Ernesto Olariaga, director del instituto, que recibía el galardón de la ONG Save The Children en reconocimiento a la labor e implicación del centro con los derechos de los niños y niñas de todo el mundo.

'Kilómetros de solidaridad' es el nombre que recibe la iniciativa que desde 2004 impulsa Save The Children para implicar a los centros educativos y fomentar el apoyo a sus proyectos de educación, supervivencia y protección de los niños más necesitados. Es una carrera escolar donde los alumnos se calzan las zapatillas por una buena causa, con el fin de recaudar fondos para los niños que sufren las consecuencias de la desigualdad, y que tendrá lugar de nuevo el próximo 20 de noviembre.

Niños ayudando niños

Pero 'Kilómetros de solidaridad' es mucho más que una carrera solidaria. Se trata del compromiso adquirido por parte de los profesores y alumnos del centro de preocuparse por conocer las situaciones de desigualdad y emergencia humanitaria que existen en el mundo. Es un programa creado para sensibilizar a los alumnos a través de clases, charlas y actividades, y hacerles conscientes de la realidad que asuela nuestro planeta, en el que infinidad de niños y niñas sufren desigualdades e injusticias a causa del hambre, la pobreza extrema o la guerra.

Casi todos los alumnos presentes en el acto, realizado en la biblioteca del centro, han pasado por los cursos de voluntariado que el instituto inicia cada año en noviembre. El objetivo es despertar en ellos un espíritu crítico que les ayude a recapacitar sobre las situaciones de emergencia humanitaria y de injusticia social.

Hace ya 15 años que el centro educativo comenzó con esta aventura. Desde entonces no ha habido un año en que no hayan participado en el programa y esperan seguir así, como aseguró Carmen Fernández, profesora de Educación Física del centro y una de las docentes que más ha impulsado la iniciativa desde el principio. «Para nosotros es un honor que hayáis venido hasta aquí a entregarnos el galardón. Es una inyección de motivación y de energía para seguir en la misma línea», indicaba la docente a los representantes de Save The Children. «A Javi (compañero docente de Educación Física) y a mí, 'Kilómetros de solidaridad' nos pareció una actividad perfecta para llevarla a cabo en nuestra asignatura», continuaba Fernández. «Hemos evolucionado mucho. Al principio era una pachanguita en el colegio y ha ido creciendo», aseguraba mientras comentaba orgullosa que fueron los propios alumnos los que pidieron salir a la calle a seguir recaudando fondos para la ONG con, por ejemplo, ball pagès en el mercado o en el parque, o recolectando fondos por la calle con unas huchas confeccionadas para la misión.

«El merecido galardón se debe a un trabajo continuado. Son ya quince años preocupados por conseguir que los derechos de los niños y de las niñas más vulnerables sean respetados. Si hubiera más personas como vosotros y como vosotras, otro mundo sería posible. La solidaridad salva vidas», aseguró Juan Gillón, responsable de los programas en centros escolares de Save The Children en España, mientras entregaba la estatuilla al director del centro.

«Se trata de un reconocimiento al compromiso adquirido en los centros de formar a los alumnos académicamente, pero también como personas, como ciudadanos competentes, inculcando valores firmes basados en la solidaridad», agregó Olariaga agradecido.

Un año más, los alumnos del centro participarán en 'Kilómetros de solidaridad', una carrera que enseña a los niños los valores de generosidad y respeto, o lo que es lo mismo, a «dejar de mirarse el ombligo», como añadió Gillón entre risas.