La Alianza por el Agua reclamó ayer un plan director para el alcantarillado de la ciudad de Ibiza para solucionar los problemas de vertidos fecales en las calles durante periodos de fuertes lluvias. La Alianza por el Agua recuerda en un comunicado que la principal causa de estos vertidos es la falta de separación de las redes de saneamiento y pluviales en la ciudad.
Además, la impermeabilización del suelo urbano ocasiona que el agua no se filtre y se incremente fuertemente la escorrentía superficial, ocasionando inundaciones del núcleo urbano y elevados caudales de aguas pluviales, apuntan. Esta situación provoca que en periodos de fuertes lluvias la red de alcantarillado no tenga capacidad hidráulica para absorber todo el agua y acabe rebosando las aguas fecales en las calles de la ciudad.
La Alianza celebra que la remodelación del frente marítimo de ses Figueretes incluya la separación de las redes de saneamiento y pluviales. Y recuerda que «los tanques de tormenta en construcción en el puerto son insuficientes y no solucionarán completamente los problemas de inundación y saturación de la redes de alcantarillado». «Estos tanques de tormenta -añaden- están diseñados principalmente para recoger las primeras lluvias de tormentas y retener la contaminación de la escorrentía urbana, eliminando el vertido de aguas contaminadas al medio marino portuario». Por ello, estiman que se debe plantear una solución global mediante un conjunto de actuaciones definidas en un plan director de alcantarillado.
Diagnóstico de la situación
Diagnóstico de la situación
«Las redes de alcantarillado son las infraestructuras más olvidadas del ciclo urbano del agua. El hecho de ser una red subterránea y tener un funcionamiento a plena capacidad en pocos periodos del año hace que la ciudadanía perciba su necesidad únicamente cuando se producen fallos y vertidos, como los sufridos en Ibiza».
El plan que reclama incluye un diagnóstico de la situación de las infraestructuras de alcantarillado, propone mejoras técnicas tales como construir una red separativa de aguas fecales y pluviales, y la ejecución de infraestructuras de laminación y evacuación de las aguas.
Además, la ciudad debe desarrollar sistemas de drenaje urbano sostenible, como aceras permeables con vegetación, cunetas y zonas verdes para la infiltración y almacén del agua. Así se hará más permeable el suelo urbano y se evitaría la saturación de las alcantarillas en fenómenos de gotas frías.
